Monedas al aire

Las fotografías están colocadas por el mismo orden de representatividad que tienen los partidos, en la actualidad, en el Ayuntamiento de la capital. Todo hay que medirlo en un tiempo de tensiones directas e indirectas, a diestro y siniestro, por aquello de que hay elecciones municipales y queda un largo e interesante camino por recorrer. Incluye, además, una cara nueva en el espectro municipal que las encuestas introducen como un partido que hará juego en el tablero de ajedrez en el que unos serán peones, otros los alfiles y, así, correlativamente, hasta llegar al rey. Hay cambios en las principales caras que se verán en las urnas el 28 de mayo después de debates, mítines, sondeos y encuentros inesperados por las calles de la capital. Empieza la cuenta atrás hacia una interesante cita con las urnas en la que las monedas se encuentran en el aire.

En el Partido Socialista, Julio Millán aspira a reforzar el bastón de mando sin socios en los que apoyar su programa electoral. Se guardó en la manga el as del Cetedex y, después de los vaivenes del Plan Colce que pusieron en peligro su futuro y el de sus siglas, consiguió aumentar el grado de confianza de un electorado rebotado por las circunstancias. La presencia de ministros, las obras de última hora y los proyectos sacados de la chistera del olvido les hacen correr con ventaja. No es lo mismo gobernar que estar en la oposición.

El Partido Popular hace borrón y cuenta nueva con un equipo de hombres y mujeres, liderado por Agustín González, con más tachones que un examen a bolígrafo. A por todas van quienes están convencidos de que corren buenos tiempos para la lírica, con aires procedentes de Sevilla que veremos a ver si dejan el mar de olivos en calma o con marejada. Es el ahora o nunca en la Diputación Provincial de Jaén, un riesgo que hay que correr cuando uno va a por todas. En Ciudadanos, que fue lo que fue y se quedó en lo que se quedó, Gabriel Soria hará lo que esté en su mano, pero el aparataje del partido pesa y la marca en declive resta. No es fácil lidiar con el toro de la experiencia después de las escenas vividas en un Ayuntamiento con pactos que terminaron en dimisiones y retiradas del carné.

Lo de la izquierda ya es de órdago. La división con la que concurre esta ala de la política municipal hará que el electorado, confundido por las circunstancias, opte por un camino diferente que, a la postre, beneficiará al enemigo íntimo, porque ya se sabe que, en política, dos más dos no suelen ser cuatro. El caso es que Podemos y Jaén, Sentido Común irán por un lado, con Francisco Sánchez del Pino como candidato, e Izquierda Unida, Más País y compañía, con Carmen María Soria como aspirante al bastón de bando, irán por otro bajo la marca “Para la Gente”.

El último de la baraja es Jaén Merece Más, que se estrena en una cita local con el catedrático Manuel Carlos Vallejo como cabeza de lista. La extrapolación de resultados de las elecciones autonómicas a las municipales otorga un excelente lugar a un partido nuevo y con mirada crítica, pero ya se sabe qué ocurre con inocencia del principiante. Todo está por hacer desde hoy, día de la convocatoria oficial de los comicios, hasta el 28 de mayo. La mayoría absoluta es una utopía. Estará entretenido un juego muy serio.

La moción que el Partido Popular presentó en el Senado para sacar a la provincia del ostracismo ferroviario en el que unos y otros son responsables sigue dando coletazos políticos. El último tiene que ver con Jaén Merece Más, que anuncia su salida del movimiento de la Federación de la España Vaciada por un motivo que se cae sobre su propio peso: la abstención de Teruel Existe en la votación acerca de la propuesta mediante la que los populares instaban al Gobierno de España a adoptar las medidas necesarias para que Jaén tenga un acceso adecuado a la red ferroviaria de las líneas de alta velocidad. Ya se sabe lo que dice el refrán, que no sólo hay que serlo, sino también parecerlo. La ruptura de las relaciones regala alas de independencia a una fuerza política que aspira a meter cabeza en la Diputación como objetivo final en esa apuesta firme por el Ayuntamiento de la capital. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Hay tensiones en el seno interno de una directiva en la que se cae la número dos, no de la candidatura, sino de la organización. Carmen Barrios, vicepresidenta, abandona, y con ella se van unos cuantos afiliados que prefieren mantenerse en el anonimato y centrarse en sus negocios.

El plantel de candidatos de los principales partidos que gobiernan en las alcaldías jiennenses destaca por la continuidad de sus candidatos, muchos de ellos alcaldes en la actualidad. Tanto los socialistas como los populares apuestan por el “Virgencita que me quede como estoy” en las elecciones municipales del 28 de mayo, aunque habrá sonoras ausencias, ya conocidas. Una de ellas es la del actual alcalde de Escañuela, Francisco Javier Sabalete, que dice adiós a un cargo en el que se mantuvo durante tres décadas y, además, sin oposición. Otro es Pascual González, en Santiago-Pontones, otro veterano que deja el testigo en manos de una mujer después de pedir una prórroga para deshojar la margarita.