Turismo activo y de naturaleza

    28 dic 2025 / 08:45 H.
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    La Navidad es una época propicia para el turismo de interior y, en este sentido, Jaén es una de las provincias de Andalucía más atractivas en un invierno recién estrenado con nieve. Se dan todos los condicionantes para atraer todas las miradas hacia un tierra que ofrece cada vez más experiencias, algunas sorprendentes, con la gastronomía y el paisaje como máximos exponentes de su riqueza. Las previsiones, en la recta final del año, apuntan a que los alojamientos rurales estarán con ocupaciones cercanas al 70%, diez puntos porcentuales más que en 2024, mientras que el alojamiento hotelero tradicional alcanzará el 80% de ocupación en la mayor parte de los territorios andaluces.

    En la diversidad está la solución. Las celebraciones navideñas hacen que los visitantes y los propios residentes se sientan atraídos tanto por la programación preparada por sus ayuntamientos en pueblos y ciudades, como por esos viajes de trayectos cortos que benefician a los empresarios que comparten el mismo acento, por lo que esta es la época del año que más invita a los jiennenses a conocer alguna de sus diez comarcas, a veces más visitadas por gente de fuera que por sus propios paisanos.

    Los hosteleros deben estar preparados para afrontar el último fin de semana del año, uno de los más concurridos, y sortear los obstáculos que encuentran en el camino, sobre todo aquellos que están relacionados con las contrataciones. Hay que tener en cuenta que estamos en plena campaña de recolección de aceituna y resulta complicado encontrar mano de obra para trabajar en la estacionacionalidad del sector de la restauración, donde faltan profesionales cualificados en las cocinas y en los salones. Los alumbrados navideños se suman al tradicional atractivo patrimonial del turismo de interior y rural, que cada vez tiene más fuerza, porque los turistas se interesan más por la naturaleza y las experiencias relacionadas con las sensaciones. El reto está en aumentar las pernoctaciones, a lo que contribuirá, sin lugar a dudas, el oleoturismo.

    Editorial
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