Empleo estacional en verano

Empieza una etapa vacacional que sirve de asueto para muchos y una oportunidad de trabajo para otros. Son muchos los jóvenes, independientemente de su dedicación durante el año, que aprovechan los meses de verano para poner en práctica la teoría aprendida durante el curso y otros que ven en el sector servicios, especialmente el turístico, la única opción para ganar dinero cuando más aprieta el calor. La costa es, sin lugar a dudas, el destino que más opciones brinda en bandeja, un filón temporal que hace que bajen las listas de desempleo, pero que significa la potenciación de puestos de trabajo que ofrecen poca estabilidad y, en muchos casos, bajos salarios. Los sindicatos están obligados a mantener activa la vigilancia en una época en la que, además, suelen producirse más accidentes laborales. También los empresarios deben hacer lo posible para ofrecer las mejores condiciones en un mercado cada vez más competitivo. La historia se repite desde aquellos años setenta del siglo pasado en los que la emigración fue un hito en la historia de la provincia. El problema de fondo no es otro que la falta de oportunidades que ofrece la tierra del mar de olivos en unos meses en los que todo parece petrificado y, aunque la tendencia está cambiando, lo cierto es que hay quienes tienen por costumbre coger la maleta en vacaciones para conseguir dinero que ayude a la economía doméstica. La consecuencia: la reivindicación de proyectos que contribuyan a la generación de empleo de calidad y, a su vez, de riqueza en un territorio con un gran potencial, tanto por su posicionamiento orográfico, que es estratégico, como por sus ventajas naturales, paisajísticas, monumentales y culturales.