Crece el malestar en Cazorla

Los vecinos de Cazorla no están dispuestos a aceptar la ubicación provisional del centro de salud fuera del casco urbano y, después de la cadena humana celebrada ayer, continuarán con las protestas necesarias hasta conseguir la solución que consideran que merecen. El traslado de la Atención Primaria al Hospital de Alta Resolución conlleva caminatas por una carretera sin arcén que pone en peligro la integridad de los usuarios, una situación anormal que, por otra parte, la Junta de Andalucía trata de remediar en connivencia con el Ayuntamiento. La cuestión no está en facilitar el transporte público, sino en buscar un emplazamiento acorde con las circunstancias. Ni que decir tiene que el juego político entra en acción y la oposición al Gobierno autonómico aprovecha el malestar ciudadano para arremeter contra el “enemigo”. Está claro que el consultorio se encontraba en un estado lamentable y peligroso que hacía inviable mantener los servicios sanitarios por más tiempo, tal y como corroboraron los propios técnicos. Sin embargo, urge la búsqueda de un lugar que responda a los intereses generales, con especial atención a las personas mayores y a quienes tienen dificultades de movilidad. No queda más remedio que trabajar sin descanso, con diálogo permanente ente las administraciones implicadas, para resolver el problema y, sobre todo, salvaguardar la seguridad y la salud de los cazorleños. La Consejería de Fomento entró en escena también y ya tiene iniciados los trabajos para construir un nuevo acceso peatonal. Hay visos de que existe preocupación y mano tendida para dar respuesta a los vecinos, pero no se puede hacer de espaldas a ellos y sin contar con el municipio.