Consenso para el gasto militar
El próximo miércoles, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparecerá en el Congreso de los Diputados para explicar el posicionamiento de su Ejecutivo sobre el rearme en Europa y la necesidad de acelerar el gasto en defensa con el socio minoritario de coalición, Sumar, y otros aliados posicionados frontalmente en contra. Está clara su intención de incrementar la inversión en seguridad y alcanzar el objetivo pactado con la OTAN antes de lo previsto, es decir, llegar al 2% del PIB antes de 2029. No obstante, todavía tiene que explicar cómo piensa hacerlo, en qué plazos y cómo sorteará la falta de apoyos entre la mayoría que hizo posible su investidura. Las discrepancias internas se hicieron visibles la semana pasada con Sumar, lo mismo que con otros socios habituales del Gobierno, como ERC y Podemos. Habrá que conocer los detalles de los planes del Gobierno y, sobre todo, hacer posible que haya votación en la Cámara oportuna para conseguir que una decisión trascendental, que mermará las arcas públicas, cuente con el máximo consenso posible. Lo que está en discusión en este momento condicionará el futuro del continente por un tiempo que se presagia largo, liquidada para siempre la lógica de la posguerra, después de los recientes cambios geopolíticos que han provocado un giro en el devenir de la guerra en Ucrania y que afectan de lleno a la seguridad de Europa. La llegada del presidente Donald Trump a La Casa Blanca y la retirada de apoyo militar al país ucraniano sacude a Bruselas, que ha asumido que tiene que tomar las riendas de su propia defensa y poner este asunto en el centro del debate.