EDITORIAL
El olivar, tal y como está concebido en la actualidad, es mucho más que el aceite de oliva que se extrae de él. Significa un modelo económico que convierte a la provincia en la mayor industria almazarera del mundo, responde a una cultura milenaria y una forma de vivir única y abre un sinfín de posibilidades enmarcadas en la sostenibilidad en un momento en el que el cambio climático es, más que una amenaza, una realidad. Son muchas las asignaturas pendientes en un sector clave para los pueblos y ciudades jiennenses, pero también resulta importante celebrar su importancia en el entorno e, incluso, en el contexto internacional.
Hay que aplaudir celebraciones como la Fiesta del Olivar y del Aceite de Oliva Virgen Extra de Sierra Mágina, que organiza con carácter anual el Consejo Regulador de la Denominación de la comarca y que suma veinticinco ediciones. Se trata de una muestra que contribuye al incremento de la autoestima como principales productores de un producto ligado a la salud a una cultura milenaria en torno a un cultivo que forma parte del ADN jiennense. Hay motivos, además, para el jolgorio, después de una campaña alta y con buenas perspectivas para la siguiente gracias a las lluvias que regaló la primavera. Sin embargo, los agricultores no pueden bajar la guardia y, alto y claro, están obligados a clamar contra las injusticias, como los vaivenes de los precios, los aranceles y las fluctuaciones del mercado. No se puede permitir, a estas alturas, que unos trabajen para que otros se pongan la medalla del valor añadido. Una vez ganada la batalla de la calidad, indiscutible en este momento gracias también a la labor que realizan las denominaciones de origen, queda conquistar nuevos mercados en los que todavía no se utiliza de forma mayoritaria el aceite de oliva como principal grasa alimentaria, algo en lo que queda camino por recorrer. En este sentido, el sector empresarial necesita la alianza de las administraciones públicas para entrar en países en los que resulta complicado penetrar para que hacerlo deje de ser un riesgo.
