Una medalla
de San Miguel

    09 ene 2018 / 08:57 H.

    Con mucha ilusión he recibido este año mi regalo de Reyes. He visto cómo los Reyes son los Magos de una tradición que nos adentra en el mundo apasionante de una felicidad con raíces robustas, firmes y esperanzadoras. Este año yo he recibido, en esta noche de ensueño y de emociones, unos tirantes. Pero no son unos tirantes cualquiera, sino los tirantes que llevan la bandera de España. Ciertamente me he emocionado. Y en este ambiente mágico y entrañable he dedicado este regalo a Víctor Láinez, un hombre que desde la valentía de sus propias convicciones fue asesinado por un presunto criminal que ya desde hace tiempo enarbola la bandera de la violencia y de la antiespañolidad; y que por esos motivos es apoyado y recibe prebendas y premios de algunos políticos que están bien incrustados en la política española. Estos políticos viven de la política española, pero: ni son españoles, ni son demócratas, ni son trigo limpio; son los traidores que siempre ha habido y que por desgracia siempre habrá. Son los vulgares asesinos que emergen de una sociedad democrática débil y muy vapuleada por tan variados motivos. Son traidores y asesinos que quieren destruir España, para ir construyendo la nueva transición hacia otra dictadura. Una dictadura opresiva. La dictadura de un nuevo y feroz proletariado o la dictadura del Populismo o la dictadura de la izquierda radical. Una dictadura antisistema y anti ser humano. Gracias Víctor Láinez, tu ejemplo ha de servir eternamente para el enaltecimiento de España y de los auténticos valores.

    en los matrimonios, durante los periodos vacacionales, los conflictos latentes se agudizan con una convivencia más intensa y resulta en resoluciones intempestivas que llevan, en algunos casos, a una ruptura irreversible. Pero cada nuevo año que comienza está cargado de esperanzas, de superar tensiones y situaciones desagradables que hacen de nuestro paso por la Tierra un camino áspero y dificultoso. 2018 puede ser diferente en nuestras relaciones, si, en lugar de quedarnos en la negatividad, aspiramos a un poco de luz que ha de venir de lo alto, si permitimos que Dios entre, con su voluntad sanadora de conflictos, en nuestras vidas. Desacuerdos que muchas veces son fruto del egoísmo. No ha de ser así, y menos después de clausurado un tiempo de Navidad que nos recuerda que la paz sí es posible, si se elige la senda de los preceptos divinos que nos llaman a la comunión con Dios, con el Amor, para dar después ese mismo amor a los que nos rodean, perdonando injurias y dando una nueva oportunidad a los que nos han hecho el mal. Dios está con nosotros, con Él todo tiene solución si se espera con fe inquebrantable, entonces lo malo se torna bueno, porque una vez superado, nos madura y refuerza nuestra unión, y lo bueno es un motivo de acción de gracias, porque para el que vive como hijo de Dios nada que le convenga le será negado del Cielo. “Venid a mí los que estáis cansados y agobiados y yo os aliviaré” (Jesucristo). Qué buen indicio para saber cómo es Dios y qué quiere de nosotros: una fe confiada y un propósito para seguir sus mandamientos, la brújula que nos lleva a una vida plena de satisfacción sobrenatural y humana, como herederos que somos, de su Cielo.

    Por medio de la presente quiero hacer público mi agradecimiento al equipo médico de la Clínica Cristo Rey en la figura de los doctores Zorrilla y Jiménez, así como la doctora Mercedes, directora de la citada clínica, por sus atenciones durante mi periodo de hospitalización. Igualmente quiero felicitar a dicha clínica por todo el equipo de enfermería y auxiliares de la tercera planta que no solo han sabido actuar de forma profesional sino también humana respecto a mi enfermedad y hospitalización. Sinceramente creo que la profesionalidad y la actitud humana mostradas en mi persona por parte del personal de la Clínica Cristo Rey de Jaén eleva la calidad de la sanidad en España.

    Estimado director. Repasando archivos y recordando la gran historia informativa y promocional de nuestro querido y entrañable Diario JAÉN, al que he pertenecido durante más de veinte años, tengo que felicitarte ya que estas páginas son un fiel reflejo de nuestras vivencias y costumbres. Me refiero a esa magnífica iniciativa de plasmar cada día, cada semana y cada mes de los últimos años la religiosidad popular y entrañable a modo de crónica y reportajes de todas y cada una de las cofradías jiennenses, incluyendo romerías, procesiones y otros grandes acontecimientos romeros, así como un cúmulo de bonitas historias fotográficas inéditas, que a veces nos recuerdan a personajes ya desaparecidos y otros actuales que trabajan al frente de sus juntas directivas constituyendo una bien formada familia que Diario JAÉN, a través de su crónica y reportajes, da forma en reaidad. Ante todo este magnífico seguimiento. Ante este magnífico seguimiento advertir que el patrón de Úbeda, San Miguel Arcángel, cuya festividad es el día 29 de septiembre, no tiene en Diario JAÉN la medalla correspondiente, que se le debería otorgar. Te pido que tengas a bien dotar a la ciudad de Úbeda, Patrimonio de la Humanidad, de esta medalla y, más concretamente, la correspondiente al grupo parroquial San Miguel.