Verano repentino

Esta primavera que parece más un verano anticipado, y los cuerpos no se adaptan bien. Además el odioso confinamiento a muchos no nos va a permitir la conocida “operación bikini”, porque ni con rápidas dietas milagro vamos a conseguir perder esos kilos ganados estos meses de encierro y visitas continuas a la nevera, ni tampoco machacar el cuerpo, que ahora se están viendo más deportistas que nunca colapsando las calles sin guardar siquiera la obligatoria distancia de seguridad, para luego, ya que podemos pisar alguna terraza, nos hinchemos a cañitas con sus tapitas, o barbacoas entre amigos, eso sí los justos porque también está limitada la amistad en grupo, aunque los hay quien esto igualmente se lo salta a la torera, sin pensar que así podemos no frenar la dichosa pandemia que nos castiga, aunque es cierto que volver a vernos y disfrutar todo eso no tiene precio, pero tenemos que ser conscientes, de que cualquiera nos puede contagiar el conoravirus. En mi opinión, ¿que más nos da ahora la “operación bikini”, si tenemos problemas mayores que estar algo más gorditos?, que lo primero es la salud. Yo me voy para mi barrio gordita y todos me quieren.