Tinta, papel y... gominolas

    25 feb 2018 / 11:15 H.

    De un tiempo a esta parte la prensa escrita parece estar en crisis. En realidad goza de una mala salud de hierro aunque cada vez se tiene que enfrentar a más avanzadillas digitales en una batalla en la que no tiene todas las de ganar. Hace tiempo se cantaba que “el vídeo mató a la estrella de la radio” y sin embargo ahí siguen las ondas. Esperemos que ahora el papel venza a las redes o, al menos, las mantenga a raya. Los periódicos, tanto nacionales como regionales o provinciales, atraviesan crisis de muy diversa índole y los que subsisten con su venta notan resentirse el negocio. De ahí que los kioscos de prensa se hayan reconvertido en tiendas de “chuches” o en bazares. El recio olor de la tinta impresa se ve ahora aderezado con el dulce aroma de las golosinas como si una fuerza superior hubiera diseñado un nuevo escenario en que tanto el cuerpo como el alma puedan alimentarse a la vez.

    Pero no todo es negativo. Treinta años lleva nuestro Diario JAÉN impulsando entre los más jóvenes el amor por la prensa, por el periodismo, por la noticia, a través de sus campañas Prensa Escuela y los certámenes de Jóvenes Periodistas. Colegios de toda la provincia reciben la visita de los profesionales del periódico para alentar nuevos lectores, quizá incluso nuevas vocaciones y no dejar que la llama de la prensa muera entre estertores digitales. Más de una vez, a lo largo de mi vida docente, incité a mis alumnos y alumnas a participar no solo en estas exitosas campañas sino también en la creación de revistas y periódicos escolares en los que definir lo aprendido y completar los contenidos y objetivos curriculares manejando la noticia, la entrevista, la redacción o la investigación. “Papeles Escolares”, “Puerta Abierta”, “Nuestra Escuela” o “Rayud”, entre otras, han sido elementos de discusión, de estudio, de búsqueda o de análisis en nuestras aulas. En muchas ocasiones, incluso, los padres y madres colaboraron gustosos en estas iniciativas en pro de la prensa, hecho recogido habitualmente en las páginas de Diario JAÉN retroalimentando el esfuerzo y la necesidad de abrir nuevas puertas a la enseñanza.

    Avivemos la lectura de la prensa desde edades tempranas como excelente medio para conseguir ciudadanos libres, responsables, críticos y con capacidad de renovar la sociedad. Recordemos que alguien informado es difícilmente manipulable. Un ciudadano informado sabrá enfrentarse a los entresijos político-sociales con ojos abiertos a la inteligencia. La información da lugar a empoderamiento, da libertad para decidir lo que deseas y crees justo, adecuado, sensato y no lo que tratan de imponerte. Y todo eso, sin duda, nos lo puede dar el periódico nuestro de cada día. Bienvenido sea.