Solidaridad ante el dolor
Que la vida te puede cambiar en un minuto lo estamos viviendo. La sinrazón meteorológica que te hace pasar de una terrible sequía a inundaciones que hacen estragos...¿qué está pasando? Creo que no tenemos respuesta. Sobre si se pudo o no prever y prevenir los estragos de la DANA, o buscar responsables, que es la única lucha existente ahora entre nuestros políticos cuando lo importante ahora son otras cosas, ya no tiene sentido pues ocurrió, y solo nos queda esperar que por quienes pueden se tomen las medidas oportunas en el futuro. Tras más de una semana desde que ocurrió la catástrofe de Valencia es el tema con el que seguimos levantándonos y acostándonos a diario sin tener información certera de qué ocurrió en realidad con el aviso de alarma roja y en quién debe recaer las culpas, ni cuando se dará una solución efectiva a lo que está ocurriendo; aunque lo que verdaderamente es importante es que la sociedad por una vez ha actuado “todos a una” y por lo que debemos como ciudadanos de sentirnos orgullosos es de la solidaridad de tantos voluntarios, la ayuda material que se ha llevado gracias a la solidaridad de la gente anónima y ayuda de muchas empresas. Esa solidaridad y hermandad es el motor que debe dirigirnos y no tantas luchas. Y con esa esperanza me quedo en mi barrio.