Sí a Colón

El presidente del Gobierno ahora cataloga a los españoles. Por ejemplo, de los que no están a favor del indulto a unos condenados, dice que es la España aferrada al pasado, la que está en contra de todo, la que no es magnánima. Él es la España magnánima. Este hombre es por lo menos un cuenta películas. Lo que hace es enfrentar, su discurso no respeta a aquellos que debiera amparar. Y lo peor es que pretende llevar razón con tan pueril argumento. Los presos del procés han declarado que nunca pedirían el indulto y que volverían a hacer lo que hicieron, ¿por qué tenemos que ser magnánimos con ellos? Son poderosos y han buscado el enfrentamiento civil en Cataluña echando a la calle a los más violentos de cada casa para hacer “su revolución”. Los disturbios y la inestabilidad política hicieron sufrir al país de forma grave. La manifestación de Colón es necesaria y es una bofetada en la dura cara de este político. Nos toma por tontos. Pero no estamos tutelados y menos por él. Nos clasifica como hacía Arzallus: “Es o no de los nuestros”. En Colón habrá personas hasta “de los suyos”, el 61% de los españoles no admiten el indulto.