Proyecto en marcha

08 jul 2019 / 09:22 H.

Hace ya 50 años que escribí un artículo en el que dejaba bien claro que en el fútbol de Jaén existe un problema casi constante y una actitud de los aficionados que tampoco cambia. Decía que rara es la temporada en la que el Real Jaén se encuentra, por estas fechas, desasistido, sin que se viera con claridad la posibilidad de encontrar un presidente que fuese capaz de asumir la responsabilidad y el riesgo de hacerse cargo del club. La afición buscaba desesperadamente un redentor, alguien que diera vida y continuidad al club blanco. Un redentor que era recibido con palmas y olivos y que pasada una o dos temporadas, era crucificado a la espera de otro redentor. Es verdad que en alguna ocasión la gestión de los rectores fue tan lamentable que estaba justificado el hecho de pedir su dimisión. Tomás Membrado fue recibido como otro redentor, cuando la situación del club era caótica, como tantas otras veces. Después de dos temporadas en las que se estuvo muy cerca de conseguir el proyecto soñado, ya hay quienes andan buscando una cruz. Se ha hablado, no demasiado, de que existía otra opción y parece que Nicolás Sabariego estaba dispuesto a asumir el proyecto si se le daban todos los poderes, aunque hablaba de que Membrado, si lo deseaba, podría seguir formando parte de la directiva. No conozco personalmente a Nicolás Sabariego pero sí sé de la buena labor que viene desarrollando en el fútbol sala jiennense. Nada tengo que objetar pero Tomás Membrado ha demostrado su interés por seguir presidiendo al Real Jaén y está en su derecho. Nadie va a negar que la junta de Membrado tuvo errores sobre todo el de confiar el proyecto a una persona que no demostró estar capacitada para asumir esa responsabilidad. Pero el afán por rectificar es uno de los deseos de la junta rectora, que ya ha puesto el nuevo proyecto en marcha. Es bueno que se aprenda de los errores y también Andrés Rodríguez ha hecho propósito de enmienda, que buena falta le ha hecho. Creo que así las cosas, intentar obstaculizar la labor no se puede justificar. Eso sí, Sabariego creo que ha dicho que contaba, para su proyecto, con la colaboración de la Diputación y del Ayuntamiento, pues bueno será que esa colaboración también sea extensiva para el proyecto de Tomás Membrado. Sea quien sea el capitán del barco, la nave es la que lleva el nombre de Jaén.