Para Celia

Mañana Celia cumple 18 años. Aún recuerdo el día en el que abrió los ojos por primera vez, con esa cara tan redondita, y esas ansias de vida que rebosaban sus llantos, parece que fue ayer. Tristemente son momentos que uno no recuerda, pero que una madre nunca olvida. Cuando naces lo que no te imaginas es la fragilidad de la vida, y lo que puedes imaginar un para siempre se convierte en un hasta que llegue su momento. Creces con la perspectiva de la facilidad, hasta que descubres lo que significa la complejidad. El mejor regalo que puedo ofrecerte es mi propia experiencia, tómala como ejemplo, tanto para lo bueno como para lo malo. Nunca desistas en aquello en lo que crees, lucha por cumple tus sueños, sólo tienes que empezar a tenerlos. El secreto de tu felicidad está en ti mismo, a partir de ahí harás feliz a los demás. No es más afortunado el que más posea, sino el que sabe sacar partido de lo que tiene. Todos los días nacemos cada vez que abrimos los ojos, bríndate la oportunidad de saber disfrutar de ello. Quiérete tanto como lo que te quiero yo a ti, entonces sabrás que lo mejor que te ha pasado en la vida ha sido nacer, y lo mejor que me ha pasado a mí ha sido ser tu madre.