Mantener la prudencia

Era de esperar que con la llegada en enero de las primeras vacunas contra la covid los políticos disminuyeran el uso de la enfermedad como arma arrojadiza y se unieran para trasladar al ciudadano la necesidad de prudencia, de mantener las medidas protectoras y evitar la euforia. Se nos comunicó que con las vacunas aprobadas, entre enero y febrero, podríamos inmunizar algo más de dos millones de personas. Importe que sería superior si entraba en aprobación la AstraZen y que en marzo y abril se incorporarían otras y empezaría la vacunación masiva. En vez de transmitir prudencia y alegría por el éxito de la ciencia, los políticos lo han devaluado y lo quieren convertir en un fracaso para dañar a su adversario. Piden mas vacunas ya y si tardan que vayan a Europa y las consigan, como si alguien las tuviera en un cajón escondidas. Son lo mas parecido a un niño con una rabieta con el único fin de molestar, a esto se les suman algunos medios de comunicación que en vez de razonar la evolución se une a una postura sensacionalista, creando ente unos y otros ansiedad en el ciudadano. No señores vamos muy bien y tenemos cerca la inmunidad, no se si un mes antes o después. Pero alegrémonos la vamos a tener. Hasta entonces esforcémonos en que muera la menor gente posible.