La verdad del mentiroso

    01 mar 2020 / 10:54 H.
    Ver comentarios

    Tenemos tendencia a dar verosimilitud a las declaraciones de alguien solo por tener fama, sin siquiera plantearnos la mínima duda. Si un líder de opinión, en tele, radio o prensa, afirma algo, todos entonamos el consabido amén. Si un futbolista de postín dice que no defraudó a la Hacienda Pública, toca poner a parir a la Agencia Tributaria. Si un cantante, con décadas de éxito a sus espaldas, asevera con rotundidad que jamás acosó a ninguna mujer aprovechándose de su condición, pues nada, vilipendiamos a esas mujeres, lo único que buscan es aprovecharse y sacar tajada del asunto. No cabe más que afirmar una cosa, leemos poco, y esa escasez lectora nos florece el moho que devora el poco sentido crítico que nos va quedando. Luego, con el tiempo, cuando las “verdades” de gurús, de famosos y famosetes, se devienen en burdas mentiras, cuando el daño está hecho, tampoco es que nos prodiguemos en reconducir nuestro criterio como ciudadanos. Y en esas estamos. Lo peor es que nada cambia, seguimos dando valor a quienes ningún o poco valor tienen.La verdad ya no es importante.

    Articulistas