Fernando Perdiguero Camps
Tanto Miguel Mihura como Fernando Perdiguero fueron los autores más prolíficos de La Codorniz, artículos casi siempre firmados con seudónimos para dar a entender que la revista tenía muchos colaboradores. Durante la etapa 42/43, Fernando se dedica íntegramente a ayudar a Mihura en su elaboración. Cuando Manuel Pombo, Juan José Pradera y Carlos Godó fundan la Sociedad Mercantil La Codorniz, nombran director a Álvaro de Laiglesia y a Fernando redactor jefe. Fernando tuvo la idea de crear una sección para criticar los despropósitos del régimen, se llamaría Crítica de la Vida, que como me comentó Gonzalo Vivas Vivillo, se publicaba con la firma de varios corresponsales, en tanto Papelín General, una alegoría al BOE, se encargó a Fernando, Tiner, cuando fallece, continua su hijo Óscar. En 1952, Álvaro de Laiglesia le expuso a Fernando Perdiguero la idea de hacer parodias de los diarios. A Fernando le pareció excelente. Se anuncia la sección con el siguiente título: “Nuestras tremendas parodias de los periódicos contemporáneos”. Tanto ABC como la Hoja del Lunes trasladaron sus elogios a la revista. Al diario Arriba le sentó muy mal la crítica y fue el causante de una de los expedientes más graves de La Codorniz. Continuará.