¿Feliz Navidad?

Otra vez es Navidad en el mercado inglés. Y en el francés. Y en el alemán. Otra vez se encienden las calles y las ventanas. Solo son doce días para tapar el descubierto del tiempo que se produce todos los años en su principio y en su final. Cuando llegue el veinticinco de Diciembre, habrán transcurrido trescientos sesenta días del año. Cuando llegue el seis de Enero faltarán los mismos trescientos sesenta días para finalizar el año. Y entonces seguiremos con nuestras guerras. Ucrania-Rusia, Machismo- feminismo. Dictadura-democracia. Cataluña-España. Vota- No votes. La Luz de Gas seguirá enganchada en nuestra clase política para hacernos creer que todo va bien. Que los malos son los otros. Que los buenos somos nosotros. Pero en esta tregua de obligada felicidad. En estos días de hipócritas golpes en el pecho. En estos días de tregua, no hay tregua para muchas personas a las que los villancicos les sonaran a misereres. Los auténticos marginados seguirán aparcados en los filos de las aceras heladas. Cada año con más luces y más miseria boquiabierta y hambruna. Y no entenderán nada. Ni de tipos de interés (qué regalo tan bonito nos acaban de hacer). Ni de primas de riesgo. Ni de Constitucionales. Ni de Sediciones. Ni de malversaciones. Ni de códigos penales. Ni de mundiales embolsados en Bruselas. Ni de Silvestres olvidados. No entiendo nada. Feliz Navidad.