Dueños de sí mismos

La calidad de la educación se mide por el progreso y los logros de los estudiantes. A la luz de los Objetivos del Milenio, la Convención de Derechos del Niño y la Constitución Española, debemos garantizar la educación, la información y la no discriminación, con formación en aspectos éticos, biológicos, emocionales, sociales, culturales y de género, también en educación sexual integral y de promoción de la salud sexual, a pesar de que éstos diverjan de las convicciones de los padres. Sólo así, aseguramos la dignidad de la persona y el libre desarrollo de su personalidad. Sócrates decía que quien se conoce a sí mismo es capaz de gobernar su vida. Este es considerado el comienzo de la Filosofía, que invita a un examen de conciencia y a ser dueños de nosotros mismos, reflexionando y haciendo un análisis crítico que nos convierta en mejores personas. El derecho a una educación de calidad se asegura poniendo en valor la Filosofía, así conseguiremos que las nuevas generaciones desarrollen el pensamiento crítico y lógico, relacionando el conocimiento, hoy tan parcelado y especializado. La madre de todas las ciencias, nos enseña a pensar y a reflexionar sobre los problemas de la humanidad.