¿De quiénes somos los mujeres?

    10 jul 2017 / 11:19 H.

    Cuando aún estamos de lleno en San Fermín, la primera imagen que vi en la tele fue de unos chicos acosando, agobiando, tocando a una chica que estaba subida a hombros de otro chico. Ella les increpaba y pedía que la dejaran en paz, pero las manos de cuatro babosos la sobaban como si fuera un objeto de su propiedad. Así, hasta que la chica tuvo que renunciar a disfrutar del chupinazo como ella quería, y pide que la bajen. Siguió increpando a los cuatro chulos-todo-poderosos, pero ella tuvo que renunciar a su disfrute para “cuidarse”. ¡Qué asco de sociedad que sigue pensando en que unas tetas o un culo de cualquier mujer que está cerca son de uso y disfrute del personal!

    Y esto es lo que día a día tenemos que aguantar las mujeres en forma de miradas, “piropos” y manos largas que nos tocan sin que queramos ser tocadas. ¿Tan difícil es entender que somos personas y que, como tales, solo queremos ser tocadas por quienes a nosotras nos dé la gana? Yo no quiero que nadie me mire con ojos de “madre mía, lo que te hacía”, ni que me digan cosas por la calle... Yo quiero sentirme y ser libre.