Cuentos chinos alcalaínos (V)

El número cinco siempre me gustó, piense usted, que número es su preferido, puede estar marcado porque en ese día le ocurrió algo que el alzhéimer no borrará. Escriba en el aire cinco veces ese número y sople sobre ellos cinco veces. A partir de ahora observará como ese número se le va a presentar varias veces en diferentes situaciones. No es causalidad, la atracción existe. Cada vez que lo vea, inconscientemente, se le vendrá a la mente, esa situación agradable que hizo que eligiera ese número y no otro. De nuevo, sin darse cuenta, se ha conectado a la red de la positividad y su día vendrá cargado de situaciones agradables, ese encuentro espontáneo, esa llamada no esperada, esa comida tan buena, hasta la sonrisa del vecino le sorprenderá. Sólo si tiene pensado comprar lotería de Navidad y alguien le viene con esa terminación, adquiéralo, podría tratarse de un presagio. Si es creyente, guarde el número junto a esa estampita de la Virgen que siempre lleva con usted o que tiene por casa. Si no lo es, guárdelo cerca de algo que le traiga buenas vibraciones. Ahora a esperar y que la suerte nos acompañe.