Con todas sus letras
Es Gaza, y el genocidio que allí se está produciendo, la urgencia más grande del planeta, y por inclusión de España? De alguna manera tenemos que decir que sí, urgente porque hablamos de miles de personas asesinadas impunemente, pero, además, porque metaforiza todos los males de este mundo: intolerancia, impunidad, hastío y cinismo. Pero es que además aquí, al menos en España, esto no se queda ahí, sino que se ha convertido en un arma arrojadiza con la que la derecha más rancia quiere abrirse paso contra el Gobierno. Y no sé yo, pero la tibieza de Sánchez con el tema es más propia de alguien a favor que en contra. De hecho, las posiciones de Feijoo y Sánchez no están tan lejos, y se separan más por la forma de expresarse que por el contenido de lo que dicen. Pero sí, Gaza se ha convertido de manera cínica en un campo de batalla donde expresar la polarización social y política. Mientras la izquierda ha encontrado en Gaza una causa para unirse y, sobre todo, mostrarse. Y eso puede ser para muchos y muchas un motivo para sospechar que el caos y la mala imagen se apoderan de nosotros. En cualquier caso, hay que aplaudir que, hasta donde sea posible, no se dé apoyo a los genocidas; no permitir tampoco, la destrucción de un país en nombre de un Dios; y que se normalice la muerte de niños y niñas, en nombre del deporte.