“Lesi” traduce lengua de signos para “agilizar la comunicación”

Adrián Garrote gana la convocatoria andaluza de los galardones Talentum

18 dic 2017 / 09:22 H.

Adrián Garrote es el creador de “Lesi”, un traductor de lengua de signos, un proyecto merecedor del premio Talentum, como iniciativa que fomenta el aprendizaje y la formación, así como la visibilidad del currículo y la experiencia laboral. De esta manera, la Fundación Telefónica brinda la oportunidad a jóvenes talentos de emprender y plasmar sus ideas en un proyecto.

La idea, tal y como asegura el linarense a Diario JAÉN, resultó primero ganadora provincial y ahora lo hace frente a iniciativas de toda Andalucía. “Al campeón le dan el reconocimiento y pasa a la final nacional, donde se dan cita los mejores proyectos de España”, afirma Garrote sobre un concurso que, de triunfar en Madrid, le “abrirá la oportunidad de formarse con expertos y obtener financiación”.

“Es un traductor de lengua de signos para personas sordas”, aclara el joven emprendedor acerca de un proyecto que está desarrollado para ordenador, a través del cual utiliza un sensor llamado “slip motion”, que es pequeño, muy potente y económico. “Sitúas las manos encima del sensor, no hacen falta guantes porque tiene dos cámaras y tres led infrarrojos, y capta el movimiento de las manos en un sistema tridimensional”, explica el linarense. Así, todos los movimientos que el usuario realiza con las manos se transforman en letras que aparecen en la pantalla del ordenador o, incluso, en un audio donde se reproduce lo que la persona sorda quiere decir. Pero, ¿cómo se consigue esto? “A través de un sistema de reconocimiento de gestos que he desarrollado”, responde Garrote, un dispositivo que, como fin último persigue agilizar la comunicación y eliminar barreras.

“La idea final es integrarlo en una tableta y hacer el traductor portátil”, comenta ilusionado el joven, aunque en su estado actual “se puede integrar en un sistema de videoconferencia”, algo muy útil, pues explica: “Puedes hablar con una persona sorda, ella hace los gestos y se escriben en pantalla o reproducen en sonido”. En definitiva, se trata de un proyecto multifuncinal, ya que, según Garrote “se puede implementar en supermercados, en colegios, tanto para profesores como alumnos sordos, o en restaurantes”. “Incluso sirve a una persona para aprender la lengua de signos”, dice el emprendedor, por lo que se “crea un sistema de enseñanza estructurado en niveles con un profesor virtual que ilustra la posición de las manos, y hasta que el usuario no lo imite correctamente, no pasa al siguiente”. que te enseñe la gramática. Adrián confiesa que vio cómo el sensor se aplicaba, sobre todo, a temas relacionados con la realidad virtual en los videojuegos, así que pensó aplicarlo a la lengua de signos.

Al fin y al cabo, explica que recibir un galardón es un “empujón”. “Siempre te preguntas si realmente merece la pena lo que estás haciendo, que te lo reconozcan te da una visión de la potencia del proyecto”, asegura Garrote, quien pretende introducir mejoras que conviertan a “Lesi” en un traductor aun mejor.