Enrique Alonso profundiza en el “padre del toreo moderno”

El Partido Popular inauguró en su sede oficial el ciclo de actos que, a lo largo de estos meses y hasta el próximo 28 de agosto, colocarán en el puesto que se merecen a la figura de Manuel Rodríguez Sánchez, “Manolete”, y el mítico escenario de la Plaza de Toros de Linares. Todo con motivo de la celebración del centenario del nacimiento del diestro y el setenta aniversario de su muerte, así como los 150 años de toreo en el Coso de Santa Margarita.

El acto comenzó con la inauguración de la exposición “Linares, tradición taurina”, que embellecerá la sede popular hasta el próximo 4 de julio, y que estará abierta a todo aquel que quiera visitarla. La muestra contó con la colaboración impagable de Ricardo Oncala en la mayoría de los objetos que se exhiben en la exposición, que además incluye enseres de toreros linarenses como Curro Martínez y Adrián de Torres.

El plato fuerte de la presentación fue la conferencia “Manolete, de torero a mito de Linares”, abordada por el periodista de Diario JAÉN y crítico taurino Enrique Alonso. Ante una sala del Partido Popular abarrotada de fieles seguidores al arte del toreo, Alonso intentó responder a la controvertida pregunta de por qué Manolete se ha convertido en el gran torero que todo el mundo venera, en lugar de otros grandes maestros que también murieron en el ruedo.

“La respuesta es que Manolete es el padre del toreo moderno, y todos quieren torear como lo hizo él. La tremenda influencia del toreo de Manolete a lo largo de la historia y hasta llegar a nuestros días es evidente. Antiguamente, el toreo se centraba más en el estilo de Joselito El Gallo, sobre los pies. Posteriormente, con Juan Belmonte, el toreo se hacía sobre los brazos. Y fue Manolete el que creó un nuevo giro que llega hasta nuestros días. Él impuso el criterio del toreo actual que es el toreo desde las muñecas”, explicó.

La importancia de “Manolete” se muestra por ser un abanderado de la marca España en su época, tal y como apuntó el crítico taurino. “En los años 40, el maestro transmitía muchos valores de los que pretendía presumir España, especialmente en México. Manolete enseñaba al mundo una nación unida y de éxito”, puntualizó.

Y toda esa influencia llega hasta nuestros días, aunque dentro del estilo que enfundó Manolete siempre ha habido diversas corrientes artísticas. El toreo ha evolucionado buscando la emoción y el riesgo, y dándole una mayor ventaja al toro en la lucha sobre el ruedo. “José Tomas se inspira en Manolete, pero arriesga mucho más. La gente que hoy llega a la plaza quiere ver esa emoción, además del arte. Este cambio en busca del riesgo explica por qué ahora están muriendo más toreros actualmente que antes. No solo por la actitud del torero, sino también porque el toro está evolucionando para ser más grande, estar mejor armado, ser más agresivo y más fiero”, indicó el periodista.

Un análisis que sirve para profundizar y entender el hecho de que entre 1984 y 2016 ningún torero haya muerto en el ruedo, y en este curso las tragedias sean ya cuatro. La última de ellas, la del diestro Iván Fandiño.