Rico jura como hermano mayor de La Buena Muerte

Sobriedad, sencillez y, al mismo tiempo, un inquebrantable respeto a la tradición. Así fue el entrañable acto con el que la Real Hermandad Sacramental del Santísimo Cristo de la Buena Muerte tomó juramento a su flamante hermano mayor, Manuel Rico Teba, en la sala capitular de la Catedral jiennense, sede canónica de la cofradía que sale en procesión el Miércoles Santo.

La ceremonia, presidida por el deán del templo mayor de la diócesis, Francisco Juan Martínez Rojas, consistió en la imposición de la medalla de hermano mayor a Manuel Rico por parte de Juan Marín, gobernador saliente, así como del cetro procesional que lo acredita como máximo dirigente del colectivo blanquinegro. Asimismo el nuevo responsable de la cofradía juró su cargo, rodeado de enseres propios del cortejo y acompañado con miembros de la hermandad.

Manuel Rico manifestó su emoción tras el acto. “Es un sueño cumplido. Llevo treinta y dos años como cofrade de La Buena Muerte y era la tercera vez que aspiraba a ser su hermano mayor”. El nuevo gobernador no niega su deseo de dirigir al colectivo durante los dos mandatos posibles, con vistas a desarrolar los principales proyectos, principalmente “mantener la línea de la hermandad, que se traduce en su seriedad, su posición y los elementos que le son propios”, expresó Rico. La presencia de la Legión, nuevamente, en la procesión de 2017 —que dan por prácticamente confirmada— y aligerar el peso de los tronos son algunos de sus objetivos inmediatos, a lo que se une el deseo de “preservar la fraternidad”.

El resto de la junta de gobierno entrante tomará posesión de sus cargos el próximo domingo, en la capilla del Crucificado titular de la hermandad.