Queda en libertad el detenido por el asalto a dos ancianos

El Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén dejó ayer en libertad al único detenido por su supuesta relación con el asalto que sufrieron un matrimonio de octogenarios en su propio piso del Polígono de El Valle. El magistrado Antonio Valdivia, en funciones de guardia durante esta semana, adoptó esta decisión al considerar que no está acreditado la participación en los hechos de este vecino de la capital. En este sentido, el juez no le impuso ningún tipo de medida cautelar, tal y como confirman fuentes judiciales cercanas al caso.

Mientras tanto, la Policía sigue trabajando para tratar de identificar y detener a los dos autores del asalto, en el que uno de los ancianos sufrió lesiones óseas en un dedo, mientras que su esposa tuvo que ser atendida por una crisis de ansiedad. Los investigadores trabajan con la tesis de que el ataque está relacionado con unas deudas que el hijo de la pareja había contraído varios días antes y que los autores quisieron asustar a la familia para cobrar el dinero que se les debía.

Los hechos ocurrieron el pasado sábado por la mañana, cuando dos hombres se personaron en la casa de las víctimas y entraron al interior tras empujar al hombre, que les abrió la puerta. Una vez dentro, golpearon a los propietarios, registraron las dependencias y se llevaron tan solo un billete de diez euros que la anciana tenía en un bolso. Después, huyeron. Un vecino que escuchó golpes avisó a la Policía y dijo a los agentes que vio escapar a los dos autores en una monovolumen de color blanco, conducido por una tercera persona.

Unos minutos después, una furgoneta, también de color blanco y ocupada por tres varones, sufrió un leve accidente de tráfico en Las Fuentezuelas. Los investigadores pensaron que podrían ser los mismos autores del ataque a los ancianos. Fueron detenidos y permanecieron dos días en los calabozos. Después, se demostró que no habían participado en los hechos y quedaron en libertad.

Fue, entonces, cuando la Policía arrestó a otro hombre. Se da la circunstancia de que estuvo en el piso con el hijo de los octogenarios. Él mismo reconoció ante el juez que estuvo allí porque el familiar de las víctimas le debía 100 euros. Sin embargo, negó cualquier implicación en el asalto. Es más, el anciano no lo identificó como uno de los dos hombres que entraron en su vivienda por la fuerza e, incluso, dijo que se había comportado de forma “educada”.

La Policía mantiene abierta la investigación de un episodio que ha creado cierta alarma social en la ciudad por la violencia empleada y la vulnerabilidad de los afectados.