Otra jornada de desolación en Cristo Rey

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La parroquia de Cristo Rey volvía de nuevo a ser protagonista el Miércoles Santo continuando con las decisiones negativas de las cofradías en esta Semana Santa. El vicehermano José Luis Cara fue el encargado de comunicar la decisión respaldada por la totalidad de la Junta de Gobierno. Los tres pasos se colocaron en los sitios correspondientes a sus capillas para realizar unas levantás en el centro. El paso del Santísimo Cristo del Amor, dirigido por su capataz Ignacio Villar, “llamó al corazón” de sus hermanos costaleros que con una sentida “levantá” al golpe de llamador, izaron al cielo al Señor. Tras este, el Santísimo Cristo del Perdón, cuyo capataz es Cristóbal Garrido, fue caminando lentamente hacia la parte central del templo donde el Perdón quedó arriado hasta el año próximo.

Finalmente, la Esperanza se dispuso a las órdenes de su capataz, Fernando Mesa y su equipo, que tras una fuerte “levantá” al cielo caminó por el centro de la parroquial hasta que sonó la “Salve de la Esperanza” que fue cantada por sus hermanos. La suspensión del desfile procesional por las calles de Jaén pasó a segundo plano cuando se conoció el fallecimiento de Miguel Ángel Martínez, padre de la Hermana Mayor, Laura Martínez y de la secretaria, Miriam Martínez. Una triste noticia que hizo que estuviera presente en todo momento en la memoria de los cofrades. En forma de homenaje, la cofradía de El Perdón quiso dedicar una emotiva y profunda “levantá” en recuerdo del fallecido, un instante cargado de sentimientos que vivieron en primera persona todos los presentes en la parroquia de Cristo Rey.