“Nuestro objetivo es empezar a explotar el tranvía a final de 2021”

No está la situación para el contacto físico tan necesario a la hora de redactar una entrevista a doble página. El coronavirus merma hasta las buenas costumbres del buen periodismo y hace que los periodistas tengan que imaginar cada gesto en las conversaciones telefónicas que permiten, al menos, trasladar a la ciudadanía lo que se mueve por los pasillos de las administraciones públicas. La consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio habla, desde Sevilla, de las buenas intenciones que tiene la Junta de Andalucía con la provincia de Jaén. Se nota que Marifrán Carazo Villalonga (Valladolid, 1977) conoce la tierra del mar de olivos como la palma de su mano.

—¿Cómo se presenta la Navidad?

—No lo sabemos a ciencia cierta. Las restricciones se están negociando con el Estado porque el coronavirus es un tema tan sensible que no podemos tomar la determinación en solitario. No podemos permitir tener en enero una resaca de la fiesta, por lo que hay que lanzar muchos mensajes apelando a la responsabilidad, estamos muy preocupados.

—Dos años se acaban de cumplir de las últimas elecciones autonómicas. ¿Cuál ha sido el compromiso de la Consejería que usted dirige con Jaén?

—Ya estamos en el ecuador y hemos pasado dos años que se han visto interrumpidos por la pandemia, pero que a pesar de la situación vivida, en la que el conjunto del Gobierno nos hemos volcado en la asistencia sanitaria y en invertir más que nunca en nuestra sanidad, esta crisis no ha parado a una Consejería que es inversora, que tenía proyectos en marcha y que, a diferencia de la crisis anterior, en la que los gobiernos socialistas paralizaron todas las obras en marcha en 2008, este Gobierno ha apostado por no parar ni una sola obra, por dar continuidad a los proyectos y por preparar otros nuevos para la provincia de Jaén.

—¿Ve una oportunidad los fondos europeos de la “ITI”?

—Totalmente. La Consejería de Fomento tiene un presupuesto de 37 millones de euros con cargo a los fondos ITI. Es una inversión histórica en la provincia, por lo que el reto está en impulsar los proyectos de ahora en adelante, además de los que tienen que ver con la conservación de las carreteras, donde la inversión ha sido muy importante en 2020, 25 millones de euros. Me reuní recientemente con la Asociación de Promotores y Constructores de Jaén y les presenté el panel en el que se puede comprobar cómo se ha repartido el presupuesto equilibradamente en el conjunto de las comarcas. Son proyectos importantes que han sumado tres millones más para dar impulso a las empresas pequeñas que, con contratos menores, nos han ayudado a mejorar la seguridad vial de las carreteras de competencia autonómica. La valoración es positiva, estamos en el ecuador y ahora nos toca continuar con nuevos proyectos y con más fuerza.

—¿Por ejemplo?

—Tenemos que impulsar la conexión ferroviaria de Vadollano-Linares, porque sabemos que es vital para llenar de empresas la antigua fábrica de Santana Motor, con una inversión de seis millones de euros para preparar el acceso a la factoría. Además, remataremos la pata que quedaba de la Autovía del Olivar en Baeza, que hemos rescatado y desbloqueado porque estaba parada, aparte de intervenir en la regeneración de espacios urbanos en la capital y en la provincia, como la reforma del Paseo Virgen del Rocío de Jaén, que cuenta con un presupuesto de 1,8 millones de euros en 2021 y que sé que es un proyecto histórico, reclamado y muy necesario. Nunca se ha invertido más en la provincia, en materia de carreteras que ahora. Nos lo reconocieron los promotores y constructores, quienes nos apuntaron que en 2015 los gobiernos socialistas invirtieron 18 millones de euros y, además, con un consejero jiennense. En 2019 hemos invertido 40 millones de euros y en 2021 vamos a superar los 100 millones de euros. Es una recuperación histórica, porque solo en 2021 vamos a invertir más que en cinco ejercicios presupuestarios juntos.

—La Junta de Andalucía ha puesto sobre la mesa 90 millones de euros para proyectos de la “ITI”, pero hay críticas de los ciudadanos porque son iniciativas que rompen con la filosofía del programa. ¿Qué opina?

—Yo creo que la “ITI” es una oportunidad que la provincia no puede desaprovechar. La Junta está haciendo un esfuerzo extraordinario por dotar de proyectos a ese presupuesto europeo que el Gobierno anterior anunció a bombo y platillo y que no impulsó y que, en un tiempo récord, hemos dotado de contenido y de financiación. En la parte que me corresponde, son 37,6 millones de euros para proyectos tan importantes como la mejora de la capacidad de la A-311, de Jaén a Andújar, con 10 millones de euros en una primera fase y que está consensuado por los ayuntamientos para hacer compatible la mejora de una vía con la actividad agrícola tan potente en la provincia. Con otros 10 millones de euros vamos a mejorar la capacidad y a rehabilitar la A-306 de Torredonjimeno a El Carpio. Se ha hablado mucho de desdobles, pero nunca de arreglo, y ambas carreteras necesitaban un acondicionamiento. También proponemos el arreglo de la A-6201 de Sorihuela del Guadalimar con la A-32, que cuenta con un presupuesto de 6,6 millones de euros y que nunca el Gobierno anterior ejecutó. La construcción del nuevo Puente del Aguadero, con otros 6 millones, o el enlace de la autovía con Geolit, que cuenta con 5 millones de euros. Vamos a ser capaces de mejorar ese acceso al parque tecnológico sin necesitar la ayuda de nadie, porque se anunció en miles de ocasiones, con convenios con otras administraciones, pero fueron incapaces de materializarlo. La Consejería que dirijo, en el marco de la ITI de Jaén, ha asumido un peso importante con la financiación de infraestructuras que está garantizada.

—¿El arreglo de la A-311 y la A-306 significa que no habrá desdoblamiento?

—Estos son dos proyectos que forman parte de la “ITI” y, al final, hemos decidido, con los alcaldes afectados, afrontar una mejora de la capacidad integral de esas dos carreteras. Hemos conseguido, entre todos, ser conscientes de la situación actual presupuestaria y valorar la situación real.

—Una de las asignaturas pendientes de las administraciones en Jaén es mejorar las comunicaciones para hacerla más atractiva a las empresas. ¿De qué manera ayudarán los presupuestos a resolver esta deficiencia?

—Yo creo que con la apuesta firme de las carreteras de competencia autonómica, con proyectos de mejora de vías que son principales y planificando el futuro. No nos encontramos en los cajones ni un proyecto listo para ser ejecutado y, sin embargo, nosotros hemos encargado la redacción de proyectos para seguir vertebrando la provincia de Jaén con el objetivo, precisamente, de ofrecer más oportunidades.

—¿Cuándo acabarán los trámites para empezar las obras de la puesta a punto del tranvía?

—Quiero destacar el esfuerzo que hemos hecho de entendimiento con el Ayuntamiento de Jaén para su puesta en marcha, una seña de identidad de este Gobierno. En base a ese diálogo, aceptamos la reclamación histórica del Ayuntamiento respecto al porcentaje de participación en el proyecto, el 75%, también en su puesta a punto, con 1,6 millones de euros incluidos en los presupuestos. Toca aprobarlos el 22 de diciembre y contaremos con esa partida para las obras y para licitar la explotación. La intención es sacar un contrato conjunto que vincule la puesta a punto, después de diez años de abandono, a la explotación. Nuestro objetivo es licitar el contrato para, a final de 2021, poder empezar, si es posible, esa explotación en periodo de pruebas. El Ayuntamiento de Jaén tiene que hacer lo mismo, presentar unos presupuestos, aprobarlos y reservar 500.000 euros, que es la parte que le corresponde. Entonces se firmará el convenio y el contrato de puesta a punto y explotación. En paralelo, hemos avanzado con el Ayuntamiento lo que tiene pendiente por abonar, 6,6 millones de euros, y estamos avanzando cómo se puede financiar esa deuda diez años después.

—La fórmula de colaboración público-privada, en la que cree su Gobierno, ¿se aplicará en algún proyecto jiennense?

—Es una apuesta de la Consejería que dirijo, pero hoy por hoy se hace complejo en materia de carreteras. No hemos descartado comenzar con alguna experiencia piloto, pero sí tengo que decir que para favorecer esa fórmula hace falta modificar la Ley de Contratos del Estado y suprimir la ley de desindexación. Ahora más que nunca hace falta apoyarnos en el empresariado jiennense, que tiene músculo y capacidad. En materia de vivienda sí es una posibilidad y estamos experimentando con un pilotaje de ocho experiencias.

—¿Cuál será la de Jaén?

—Se trata de permutar suelo protegido a empresas constructoras a cambio de viviendas para que los precios sean asequibles para los más jóvenes. Colaboración público-privada es trabajar en equipo. En estos momentos hay que ayudar a reactivar la economía en tres frentes: lealtad institucional, colaboración con las administraciones y con el empresariado.

—¿Qué le demandan los alcaldes jiennenses?

—Quieren ver mejoradas sus carreteras después de muchos años de abandono, porque Jaén ha sufrido más el déficit de inversión que otras, por lo que estamos actuando en función de lo que ellos nos indican ellos y la Dirección General de Tráfico. Nuestro esfuerzo es extraordinario porque son muchas las necesidades. Vamos en buena dirección y, en este sentido, tengo que poner en valor el trabajo de los delegados Jesús Estrella y Maribel Lozano, además de los equipos de conservación de las carreteras y los funcionarios de una Delegación que necesita contar más recursos humanos, pero que hace un esfuerzo insuperable con los que tiene.

—¿Le ha llegado la necesidad que tiene Martos de ampliar su polígono industrial?

—El Área Logística de Andalucía es consciente de la importancia que tienen los polígonos para reactivar la economía y generar empleo. También las áreas de Jaén son las más retrasadas, porque estaban bloqueadas urbanísticamente, por lo que hemos empezado por desbloquearlas con la colaboración de los ayuntamientos. Este es el caso de Martos, Linares y Úbeda. Sin embargo, quiero hacer una apreciación y es que hay alcaldes que no han perdido el tiempo, como el de Guarromán, y que se han esforzado por sacar adelante sus polígonos en esa ventana que es Jaén por su situación estratégica.

—Dijo en una entrevista, recién nombrada consejera, que no paraba de encontrarse sorpresas en los cajones del anterior equipo de Gobierno. ¿Tiene esa sensación dos años después?

—Siguen llegando sorpresas desgraciadamente como consecuencia de una mala gestión anterior. Nos encontramos sentencias de empresas que acudieron a los tribunales a diario. Hemos abonado 230 millones de euros en concepto de reclamaciones.

—¿Cree que la nueva Junta ha conseguido recuperar la confianza de los andaluces, de los ayuntamientos y de los inversores?

—Creo que sí, estamos en el camino correcto, más en la Consejería que es más inversora de todas. Nuestra intención es simplificar las normas para atraer proyectos que sean sostenibles social, medioambiental y económicamente con un texto legislativo que está a punto de ser aprobado. Será un mecanismo de empuje para atraer inversión.

—¿Qué concepto hay de Jaén en Sevilla?

—El de una tierra de oportunidades, que tiene que avanzar.