“Lo han perdido casi todo, gracias a Dios están vivos”
Los vecinos de San Felipe ayudan a una familia tras un incendio que dejó su vivienda completamente calcinada


La madrugada del 7 de noviembre se convirtió en una auténtica pesadilla para la familia de Vanesa Francés. El sueño de la mujer, de 44 años, junto al de sus hijos, de 22, 21 y 14 años, se vio interrumpido por un fuerte olor a humo. Precisamente fue uno de los jóvenes el que se despertó, y cuando abrió la puerta de su habitación y vio como las llamas envolvían el inmueble, no dudó en pedir auxilio por la ventana.
La respuesta de los vecinos no se hizo esperar, y uno de ellos consiguió acceder a la vivienda para tratar de socorrer a la familia. “Según nos cuentan, un hombre logró entrar y tapándose la cara les guió hasta la salida con la luz de la linterna”, explica a Diario JAÉN Juana Gómez, presidente de la Asociación de Vecinos El Ariete de San Felipe.
El voraz incendio afectó a los cuatro inquilinos de la vivienda, que tuvieron que ser atendidos por inhalación de humo mientras los bomberos apagaban el fuego. Vanesa, la última en abandonar el piso, se llevó la peor parte, pues al salir sufrió un desmayo. En el suceso perdió la vida un perro y el inmueble quedó completamente calcinado.
Cuando el colectivo vecinal tuvo conocimiento de la noticia no dudo en ponerse a disposición de los afectados. “Cuando llegué a la vivienda se me pusieron los pelos de punta. Las llamas hicieron que a algunas de las paredes se les viera el ladrillo y que el suelo estuviera lleno de cenizas. Lo han perdido todo, pero gracias a Dios están vivos”, lamenta Juana Gómez.
La sede de “El Ariete”, que no paraba de recibir productos de primera necesidad para los afectados de la DANA en Valencia, comenzó a llenarse en seguida de ayuda para sus vecinos. “Vanesa no paraba de repetir que no quería dinero. Por eso hemos recaudado alimentos y ropa, y el dinero donado se encuentra dentro de una tarjeta regalo que pueden utilizar para comprar bienes de primera necesidad”, desgrana la presidenta a este periódico.
Además, los vecinos colaboraron en la retirada de los inmuebles devorados por las llamas, que quedaron completamente inservibles. Mientras tanto, la familia se realoja en la vivienda de una vecina, y la madre manda un mensaje de agradecimiento en redes sociales a todos los que prestaron su ayuda. “Hoy quiero dar las gracias a todas esa gente que me están ayudando, quiero deciros que estamos bien y que dentro de lo que cabe en esta situación nos sentimos afortunados porque lo podemos contar. Fueron unos momentos muy duros pensando que íbamos a morir achicharrados”, publica. Incidentes como este sacan a la luz la unión y solidaridad de todo un barrio como el de San Felipe, que son las únicas partes positivas que se pueden extraer de un aparatoso suceso que de no ser por la rápida y eficaz intervención de algunos vecinos pudo desembocar en una auténtica tragedia.
La sede vecinal sigue recibiendo bienes básicos
La sede de la Asociación de Vecinos El Ariete de San Felipe se encontraba en pleno proceso de recolección de ayuda humanitaria para los damnificados por la DANA cuando se convirtió también en un punto de recogida para ayudar a sus vecinos. En seguida la casa del colectivo vecinal comenzó a recibir productos de primera necesidad para colaborar con la familia de Vanesa Francés tras el devastador incendio que sufrió la vivienda en la que habitaban. Así las cosas, desde El Ariete animan a su gente a seguir contribuyendo con esta noble causa. “La sede de la asociación está abierta los lunes de 17:00 a 19:00 horas y martes y viernes de 10:00 a 12:00 horas para cualquier tipo de ayuda”, apunta a Diario JAÉN su presidenta, Juana Gómez. Un verdadero ejemplo de altruismo y solidaridad con aquellos que más lo necesitan.