La víctima de la agresión sexual grupal se ratifica ante la juez

Avances en la investigación de la agresión sexual sufrida por una adolescente de 16 años el pasado 2 de marzo. La juez que instruye la causa, la magistrada Carmen Ballesteros, tomó declaración a la víctima. Una prueba que se considera fundamental, ya que su testimonio es la principal prueba de cargo contra los cinco presuntos autores de los hechos y que fueron detenidos por la Policía en los días sucesivos. Dos de ellos, de 18 y 22 años, están en prisión preventiva; otros dos, de 16 y 17 años, se encuentran internados en un centro de menores; y el quinto implicado, también de 16 años, quedó en libertad vigilada. Las fuentes consultadas explican que la víctima ratificó íntegramente el relato que ya prestó en la Comisaría. Es decir, contó que estaba caminando por el Paseo de la Estación, cuando fue abordada por cinco hombres por la espalda. Los atacantes la obligaron a entrar por la fuerza en un portal, donde la sometieron a diversos tocamientos. También explicó que se resistió y que, incluso, llegó a morder en la mano a uno de sus agresores, que trataba de taparle la boca para que no gritara. Ella consiguió pedir ayuda a voces. Los autores de la agresión huyeron cuando se percataron de que varios vecinos se asomaron al rellano para ver qué estaba pasando.

La declaración de la menor se realizó en el despacho de la juez, con la única presencia del representante del Ministerio Público, tal y como confirman las fuentes consultadas. Hay que recordar que la adolescente identificó a los cinco detenidos como los hombres que la atacaron en la tarde del 2 de marzo. Lo hizo sin titubeos y en ruedas de reconocimiento sucesivas, realizadas en la Comisaría, en presencia de la juez del caso. Es, de momento, la principal prueba de cargo. En el caso de Gabriel José C. M., el arrestado de 22 años, también presenta una herida en una mano compatible con el mordisco que relató la víctima en su denuncia.

Actualmente, hay dos procedimientos en marcha. Uno se tramita en el Juzgado de Instrucción número 4 de Jaén, en el que ayer prestó declaración la adolescente. En esta causa están encartados los dos mayores de edad, el propio Gabriel José C. M. y Miguel Ángel M. R., de 18 años recién cumplidos. Ambos han presentado un recurso de reforma ante la Audiencia en el que piden quedar en libertad, es decir, que se revoque el auto por el que fueron enviados a prisión. La decisión está pendiente.

El segundo proceso se sigue en el Juzgado de Menores contra los tres arrestados que no habían alcanzado la mayoría de edad cuando ocurrieron los hechos. Todos han negado su participación en los hechos y han presentado ante la magistrada sus respectivas coartadas. Uno de ellos aseguró que se encontraba en un gimnasio público del municipio cordobés de Bujalance y otro que se hallaba en un pub del Polígono de Los Olivares. Su defensa trata de validar estos testimonios. Para ello, ha pedido al Juzgado de Menores que solicite las grabaciones de las cámaras de seguridad de ambos establecimientos y que tome declaración como testigos a sus responsables. La gravedad de los hechos generó una enorme alarma social en la ciudad.