La Policía Nacional detiene en Jaén a siete personas por diferentes robos en viviendas

24 may 2016 / 13:21 H.

Agentes de la Policía Nacional detuvieron en Jaén a siete personas que desde el mes de enero entraban por la fuerza en viviendas para sustraer joyas, oro y dinero en metálico, pasándose entre ellos lo robado para su posterior venta. Las investigaciones se iniciaron mediante una denuncia interpuesta por un ciudadano el pasado mes de febrero, que relataba que residía en una urbanización de Jaén ausentándose durante todo el día. Al volver a su vivienda comprobó que la cerradura de entrada estaba forzada y en el interior, varias estancias revueltas, comprobando que le habían sustraído numerosas joyas tales como pulseras, collares, relojes, pendientes, cadenas, medallas y anillos, así como tres armas largas de fuego.

Tras diversas gestiones, según explican desde la Policía Nacional, los investigadores lograron identificar al presunto autor del hecho, M. M. M. de 21 años y de cómo transcurrido un mes, había vendido parte de las joyas recibiendo más de 3.000 euros. Posteriormente fue localizado y detenido. Este arresto fue el punto de partida para que los agentes fueran esclareciendo diversos robos ocurridos desde el pasado mes de enero.

Las investigaciones condujeron hacia la identidad de otro de los detenidos que había efectuado diferentes ventas de las joyas sustraídas en el robo denunciado. Esta vez se trataba de J. F. F. de 21 años de edad, que relató a los investigadores que las joyas se las había entregado un conocido suyo que le dijo que no tenía su DNI. y que estas eran de su familia, así como un reloj que le fue entregado para su venta por otro conocido suyo. Recibiendo más de 2.600 euros.

Además, en Comisaría se atendía a una ciudadana que relataba cómo al regresar a su domicilio había observado que las luces del piso superior se encontraban encendidas solicitando presencia policial. Desplazada una patrulla de Seguridad Ciudadana comprobó que los supuestos autores habían entrado en la vivienda a través de una ventana a la que fracturaron el cristal, comprobando que le faltaban numerosas joyas así como 1.000 euros en metálico. Un mes más tarde se interponía una denuncia por robo con fuerza en la que la víctima relataba que al regresar a su vivienda y acceder al dormitorio principal, este se encontraba revuelto y la puerta de acceso entre una terraza y el dormitorio había sido forzada. De igual modo, le habían sustraído numerosas joyas así como 350 euros en metálico. La venta de lo sustraído en ambos casos llevó a los agentes a identificar a A. R. D. de 29 años de edad, quien al ser detenido manifestó a los agentes que la venta de joyas la había efectuado por encargo de dos sujetos que le habían amenazado con agredirle en el caso de negativa.

Por otra parte, los investigadores resolvieron e identificaron a los presuntos autores de tres robos en vivienda investigados. Se trataba de S. G. L. y J. M. M. ambos de 22 años de edad, que efectuaban sus asaltos con el mismo modus operandi que los robos anteriores, quienes a su vez, entregaban lo sustraído a otro de los detenidos, R. P. P., de 26 años de edad, para su posterior venta. Los investigadores tras ordenar todos los hilos de las diferentes investigaciones, lograron la identificación del séptimo detenido, A. P. P., de 21 años de edad, al que le constan numerosos antecedentes policiales, tanto de la Policía Nacional como de la Guardia Civil, siendo la gran mayoría por robo con fuerza en las cosas. Robos cometidos en su inmensa mayoría en los dos últimos años.

El séptimo arrestado no realizaba la venta de joyas que sustraía por lo que ofrecía dinero o directamente amenazaba a terceros para llevarlas a cabo. Por otro lado, algunos de los detenidos a los que incitaba o amenazaba se trataba de jóvenes carentes de antecedentes policiales con el fin de dificultar las labores de investigación de la Policía, así como la incitación de estos en la delincuencia, profesionalizándose en la consecución de los distintos robos cometidos, llegando a implicar a menores que en un principio desconocían el origen ilícito de las joyas. A este detenido se le imputan cuatro robos con fuerza, dos de ellos acaecidos en la Semana Santa de 2015 en sendos centros formativos donde presuntamente sustrajo más de 6.000 euros en metálico así como más de diez ordenadores y numerosos equipos complementarios.

La Brigada Provincial de Policía Judicial de Jaén fue la encargada de realizar las investigaciones.