Jaén no frena el envejecimiento de su población

La provincia pierde un 23% de población infantil en apenas 15 años

29 ene 2023 / 17:04 H.
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Jaén es cada año más vieja. Así lo reflejan los datos del último informe de censo poblacional elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en relación a los últimos datos disponibles del último año 2022, cuyos datos han sido publicados por la entidad el pasado martes, 24 de enero.

Concretamente, echando la vista atrás 15 años, la provincia jiennense ha perdido un 23,6 por ciento de población infantil con respecto a 2007, pasando de los 117.775 niños de entre 0 y 15 años en esas fechas, a la dolorosa cifra de 89.923 niños que habitan en nuestra provincia actualmente. Es decir, Jaén ha perdido más de una quinta parte de su población infantil en una década y media.

Las razones son variadas, pero se pueden resumir en dos factores principales: la tasa de natalidad y la despoblación. Si ponemos en foco en este primer factor, descubrimos que los nacimientos han caído progresivamente y de forma inalterable desde que se tienen registros en el INE (1975). Siguiendo con la comparativa a 15 años vista, comprobamos que la tasa de natalidad en 2007 ascendía a 10,19 (nacimientos por cada 1.000 habitantes), mientras que en el año 2021 —último año con registro oficial—la tasa desciende hasta los 7,21. Estos datos se reflejan progresivamente en el día a día de la provincia. Poniendo un ejemplo, el curso escolar 2022-23 arrancó en la provincia con 1.395 alumnos menos que en el curso anterior. No es de extrañar, por tanto, que otro de los datos curiosos que hayan surgido en estos últimos meses el que también proporcionaba el INE, y en el que se registraba que el número de animales de compañía suponía ya cerca del triple a los niños en los hogares de la provincia.

Con respecto al resto de franjas de edad, se observa también un descenso paulatino, aunque menos drástico, de la población de entre 16 y 64 años, pasando de 428.136 personas en 2007 a las 408.976 que viven actualmente en la provincia jiennense, una cifra un 4,47 por ciento menor. Sin embargo, la estadística cambia conforme nos acercamos a la vejez. La provincia ve su demografía cada día más anciana, con un crecimiento del 5,07 por ciento para la población que supera los 65 años, pasando de las 118.831 personas de avanzada edad a las 124.862.

Derivados de todos estos datos, se atisba una cifra demoledora: la edad media de la población jiennense ha variado, en apenas 15 años, de 39,9 a 44,2. Más de cuatro años de diferencia en una estadística que no deja de crecer año a año.

Cifras, a todas luces, preocupantes en una provincia que pretende día a día subirse al carro de la innovación y atraer grandes inversiones. Con ellas, quizá la juventud comience a buscar un futuro en la provincia que, según los datos, aún no tiene garantizado.

La despoblación se hace cada vez más patente en los jóvenes

Los jóvenes constituyen el grupo demográfico que más abandona la provincia jiennense. Revisando las cifras de población infantil de 2007, hace 15 años, surge una pregunta: ¿A donde han ido? Y es que ese año se registraron un total de 117.775 personas censadas en la provincia menores de 16 años. Sin embargo, cuando revisamos el número actual de personas censadas en la franja de edad que oscila entre los 16 y los 30 años, el número desciende hasta las 98.791 personas. Un descenso que da como resultado la pérdida de un 16 por ciento de población joven en apenas 15 años. Es decir, cerca de 19.000 jóvenes han abandonado la provincia desde 2007 para buscarse un futuro profesional en otro territorio, ya sea nacional o internacional.

Este es uno de las principales casuísticas de una tierra que no es capaz de ofrecer oportunidades profesionales para atraer al talento joven, lo que permite que la provincia vaya perdiendo población año tras año sin que haya conseguido remediarse. Según el último informe del INE, desde 2007 a 2022 se ha perdido un 6,16 por ciento de población total. Concretamente, el año 2010 fue el último en el que se registró una subida en el censo de la provincia. A partir de esta fecha, cada año se ha ido perdiendo población progresivamente y sin pausa, dando como resultado que pasemos de las 664.742 personas censadas en 2007 a las 623.761 en 2022.

Por municipios, cabe destacar que la pérdida de población en cifras totales es mayor conforme nos acercamos a las grandes ciudades. En este sentido, Linares se posiciona como el municipio que más número de censados pierde (más de 5.000 personas), seguido de Jaén (más de 3.500 personas), Andújar (más de 3.000 personas) y Bailén (más de 1.000 personas).

Sin embargo, las cifras queman de manera proporcional, las cuales son más acuciantes en los municipios con menor población y menor acceso a servicios. Así, en la provincia hay 17 municipios que han perdido más de un 20% de su población en los últimos 15 años. Una lista encabeza por Santiago-Pontones, que desde 2007 ha perdido hasta el 42% de su población, seguido de Villarrodrigo (41,8%), Hinojares (33,4%), Benatae (29,9%), Albanchez de Mágina (28%), Chiclana de Segura (27,9%), Espeluy (25,7%), Bélmez de la Moraleda (24,6%), Villardompardo (24,1%) e Iznatoraf (23,8%). Cifras muy alarmantes que revelan que, en apenas 15 años el cambio poblacional en algunos municipios de la provincia es drástico, llegando a perder, en el caso de los dos primeros en la lista, casi la mitad de su población total, y más de una quinta parte en el resto de los citados.

Sin embargo, en la provincia jiennense hay un total de 7 municipios que, lejos de perder habitantes, los han ganado. Comparando el censo actual con el registrado en 2007, los únicos en sumar vecinos a sus calles han sido Fuerte del Rey (+22), La Guardia de Jaén (+1473), Mancha Real (+735), Martos (+188), Mengíbar (+743), Puente de Génave (+43) y Los Villares (+689). Siete municipios que en 15 años han conseguido salvarse de una despoblación que azota a prácticamente toda la provincia, que cada día forma más parte de la tristemente denominada España Vaciada. Datos a los que se deben prestar mucha atención para comenzar a realizar políticas que traigan de vuelta a esa población perdida. Jiennenses que, seguramente, volverían sin dudarlo si tuvieran una buena oportunidad.

Jaén
set (1 = 1)