En prisión el “dueño” de tres clínicas Vitaldent en Jaén

Javier Arteaga es la mano derecha del “cerebro” y “pieza clave” del supuesto fraude

20 feb 2016 / 11:36 H.

El caso Vitaldent, bautizado por la Policía como operación “Topolino”, ha llegado de lleno a la provincia. La juez María Isabel Serrano, que dirige la causa, ha enviado a prisión provisional a Javier Arteaga y a su hermano, Óscar Arteaga, que son los que expandieron la franquicia en Jaén. Entre otras cosas, Javier es el administrador único de la empresa “Timon Dental”, propietaria de tres de las cuatro clínicas Vitaldent en la provincia, en concreto, las ubicadas en la capital, Linares y Úbeda. La cuarta está en Andújar y es gestionada por una empresa completamente distinta. Los establecimientos permanecen abiertos y, desde el principio, sus empleados han transmitido la sensación de normalidad. De hecho, ayer mismo seguían trabajando, atendiendo a pacientes y concertando citas para las próximas semanas.

La operación se desencadenó el pasado miércoles e investiga una trama ideada para el blanqueo de capitales en las franquicias de la cadena. El fundador de Vitaldent, Ernesto Colman, y varias personas de su confianza habían puesto en pie un sofisticado entramado de empresas dedicado a “legalizar” las grandes cantidades de dinero B generado a través de las franquicias de la marca. El auto de la jueza de instrucción expone el papel que cada uno de los detenidos desempeñaba en la “organización criminal”. Según ha publicado la agencia Europa Press, Javier Arteaga pertenecía a la cúpula de Vitaldent y la Fiscalía lo señala como “el hombre de confianza” del presidente, Ernesto Colman. En su momento, Arteaga ocupó cargos directivos en la empresa y, en la actualidad, gestiona 22 clínicas de la marca abiertas en distintos puntos de España, sobre todo en Madrid, Canarias y Andalucía. Entre ellas, se encuentran las tres localizadas en la capital jiennense, en Úbeda y en Linares.

Para los investigadores, este empresario tiene un papel clave en la trama. Presuntamente, era el encargado de recoger en persona el dinero negro generado por estas clínicas. Lo hacía solo o en compañía de su hermano durante las visitas de control que hacía a sus franquicias o en las reuniones trimestrales con los distintos delegados, tal y como se recoge en el auto judicial. Según han publicado varios medios nacionales, Javier Arteaga reconoció ante la jueza tener “conocimiento parcial de los hechos que se le imputan” , ya que admitió el cobro de dinero B en sus clínicas y otros tantos pagos en B en diversas partidas como bonus u obras de acondicionamiento. Durante los registros, los agentes hallaron en su domicilio 66.000 euros en metálico y 615.000 euros en el de su hermano.

Por el momento, el arresto y el ingreso en prisión del “dueño” de tres de las cuatro clínicas Vitaldent de Jaén no ha repercutido en su funcionamiento cotidiano.