El letrado de Matinsreg pregunta por supuestos pagos a García Anguita
Los empresarios desvinculan a Fernández de Moya de las reuniones con la empresa
Casi ninguno de los presentes, por no decir ninguno, se esperaba lo que pasó ayer en la sala de vistas del Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén. El magistrado Antonio Valdivia, que investiga el supuesto saqueo de 3,6 millones de dinero público con facturas infladas o directamente falsas presentadas por la empresa Matinsreg por el mantenimiento de las fuentes ornamentales, había citado a declarar como imputados a cuatro empresarios. Fue en el interrogatorio de uno de ellos, José M. A., cuando estalló la bomba.
El letrado del administrador único de la empresa zamorana tenía el turno de preguntas. El investigado se había acogido a su derecho a no declarar a estas cuestiones. Sin embargo, el abogado de Matinsreg las fue planteando una a una, mientras que el investigado guardaba silencio. Así, como si nada pasara, “soltó” un misil. Directamente, a bocajarro, preguntó a José M. A. si había pagado dinero al exconcejal Miguel Ángel García Anguita tras reunirse con él en su despacho. Así, sin nombrarlas, insinuó que había “mordidas”. El empresario bramó: “Eso es mentira”, respondió con vehemencia, según confirman varios de los asistentes. El revuelo en la sala fue más que notable. El juez tuvo que mediar y recordar al letrado que esa cuestión en ninguna parte del procedimiento judicial. El abogado de Matinsreg no se calló y anunció que están en condiciones de demostrar todo lo dicho.
Más allá del órdago que, de momento, es tan solo una insinuación de lo que puede venir en este caso, la jornada de interrogatorios sirvió para avanzar mucho en la causa en la que también está imputado el anterior alcalde, José Enrique Fernández de Moya. Por la sede judicial desfilaron cuatro empresarios, acusados de delitos de prevaricación, malversación de caudales públicos, falsedad en documento mercantil, cohecho y tráfico de influencias.
El primero en declarar ante el juez fue Rodrigo G. C. Era el hombre de Matinsreg en Jaén y el encargado de recibir los partes de trabajo que debían servir de apoyo para la facturación. La Guardia Civil sostiene que esas facturas estaban infladas o eran directamente falsas, ya que incluían sobrecostes escandalosos y horas de trabajo cuya realización era materialmente imposible. El investigado echó balones fuera y dijo que se limitaba a presentar lo que le daban hecho sus subordinados sin hacer más verificaciones. Una hora más tarde, llegó el turno de su esposa, Alicia M., F., a su vez hija de José M. A. y considerada una figura secundaria por los investigadores.
Su padre sí que es uno de los protagonistas principales de la supuesta trama. Presuntamente, fue el encargado de “interceder o intermediar entre los responsables políticos del Ayuntamiento de Jaén y la empresa que se designó ‘de facto’ para la prestación de servicios”, es decir, Matinsreg. José M. A. admitió ante el juez que tenía una comisión del 10 por ciento de todo lo que facturara la sociedad zamorana al Ayuntamiento de Jaén. Según su versión, tendría que haber cobrado unos 400.000 euros. Sin embargo, la documentación aportada en el procedimiento judicial demuestra que llegó a percibir tres veces más.
Además, fue interrogado sobre una cuestión que resulta sospechosa: cómo se llevaba la comisión de una empresa en la que su propio yerno era el encargado de hacer los partes de trabajo que se presentaban al Ayuntamiento y que eran conformados por un técnico municipal, Agustín S. G., que también está investigado. José M. A. admitió que era raro, según las fuentes consultadas, aunque desligó a su pariente político de cualquier irregularidad.
El cuarto empresario que pasó ante su señoría fue Isidoro C. S. La Guardia Civil también le atribuye un papel de mediación por el que también se llevó su parte del pastel. Ante el juez, el imputado defendió la legalidad de su gestión.
Los cuatro investigados coincidieron en desvincular a José Enrique Fernández de Moya y a Rosa Cárdenas. Con respecto al exalcalde, dijeron que no se reunieron con él. También desmintieron a Luis Gregorio G. V., el administrador de Matinsreg, que dijo que el anterior secretario de Estado estaba al tanto del plan para incluir sobrecostes en la facturación para cubrir el riesgo que supone trabajar para una administración pública.
El Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén prosigue con la ronda de interrogatorios por el conocido como caso de las fuentes. Para hoy está prevista una única declaración: la de Manuel del Moral, el exconcejal de Mantenimiento Urbano en la época en que Matinsreg fue contratada por el Ayuntamiento. Los testigos sitúan al antiguo edil en las reuniones mantenidas por responsables de la empresa zamorana en el despacho de García Anguita para conseguir la encomienda de gestión de las fuentes ornamentales. También, presuntamente, habría dado el visto bueno a 99 facturas conformadas por el técnico Agustín S. S., también imputado en esta causa, y que están bajo sospecha por estar infladas o ser directamente falsas. Otra conexión de Manuel del Moral con el caso Matinsreg es que su hija fue contratada por esta mercantil a raíz de que comenzara a trabajar para el Ayuntamiento jiennenses en el mantenimiento de las fuentes ornamentales. El exedil será la novena persona que declara en calidad de investigado. Se da por seguro de que habrá más personas imputadas en las próximas semanas.
