El acceso al aparcamiento abrirá a finales de este mes

Termina el proceso de hormigonado en la calle Roldán y Marín

19 oct 2019 / 11:04 H.

Es una de las primeras grandes obras realizadas por el nuevo equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Jaén y, aunque tiene el centro prácticamente colapsado, los plazos se cumplen con respecto al calendario previsto. El acceso al aparcamiento de la Plaza de la Constitución estará abierto a finales de este mismo mes, un proyecto que ofrecerá una imagen totalmente renovada de uno de los lugares más concurridos de la capital. Al terminar noviembre, la obra se dará por finalizada.

El concejal de Mantenimiento Urbano e Infraestructuras Municipales, Javier Padorno, avanza que el proceso de hormigonado de la rampa que lleva hasta el aparcamiento ya está totalmente terminado. Los operarios estuvieron en el terreno hasta las cinco de la madrugada del jueves al viernes, puesto que se trata de un procedimiento lento y continuado que lleva su tiempo. Es un acceso de doble sentido para que los vehículos puedan entrar tanto al aparcamiento que hay actualmente como al que se construirá en un futuro en la calle San Clemente. La salida será la misma, es decir, por la calle Virgen de la Capilla, de tal forma que será escalonada y no se prevén aglomeraciones de coches.

“Se han utilizado 140 metros cúbicos de hormigón. Al mediodía del jueves, ya nos avisaron desde la empresa Vialterra de que tardarían unas cuantas horas en darle la dureza necesaria al terreno, por lo que terminaron a las cinco de la madrugada”, comenta el edil. Añade: “Falta el trozo de la entrada de la rampa, que es donde estaba situado el camión bomba, que se hará el lunes. El martes se pondrán las placas prefabricadas encima, se impermeabiliza el suelo y el siguiente paso será terminar con el adoquinado”.

Javier Padorno muestra su satisfacción por el buen desarrollo de la obra. “El compromiso de la empresa fue acabar en cuatro meses y, aunque hubo un retraso de una semana porque cayeron cuatro gotas en septiembre, recuperaron el tiempo perdido y todo está en orden”, apunta. Además, explica que los operarios salvaron los obstáculos encontrados sobre la marcha, como la existencia de un colector que no estaba previamente registrado, perteneciente al sistema de desagüe de la Plaza de la Constitución, que obligó a ejecutar una conexión nueva. También aprovecharon para realizar una obra de canalización para el alumbrado especial de feria o de Navidad. “Ya no tenemos que echar cables por encima cuando tengamos que colocar la iluminación extraordinaria”, matiza el concejal. Una vez que el acceso esté abierto, que se prevé de forma inminente, el siguiente paso será terminar la urbanización de toda la zona. Para ello se utilizará un adoquinado “de calidad” que, según Javier Padorno, tendrá diferentes tamaños, de tal forma que irá colocado en consonancia con las líneas de las fachadas existentes en la calle Roldán y Marín. Además, en la zona en la que se ubicará la Oficina de Turismo, en el edificio adquirido por Diputación, habrá más espacio para celebrar actividades. También habrá guiños al pavimento estilo Gaudí.

Trabajos arqueológicos en la galería de la calle San Clemente sin sorpresas

Las obras de excavación arqueológica en la calle San Clemente siguen su curso. Por el momento, los profesionales que trabajan en el terreno no han encontrado restos que merezca la pena conservar, puesto que se trata de una zona en la que ya se han realizado muchas obras y, por lo tanto, la huella del pasado está prácticamente borrada. Una vez que termine el trabajo de catalogación de los hallazgos, empezarán a construir la galería que unirá los aparcamientos de la calle San Clemente y Plaza de la Constitución.

Fue el anterior alcalde, Javier Márquez, quien se encargó de presentar el proyecto ante los medios de comunicación en diciembre de 2018. El solar donde estaban los antiguos almacenes de Simago albergará un moderno residencial con piscina y un parking subterráneo de tres plantas, de las que dos ellas serán para rotación —130 plazas—. La restante irá destinada a los propietarios del medio centenar de viviendas que construirá la empresa Solpriga. Estará conectado con el de la Plaza de la Constitución y su entrada se realizará por la calle Roldán y Marín, que es la que se encuentra actualmente en obras. Posteriormente, la intervención se trasladará a San Clemente.