Decomisados 2.505 kilos de “pezqueñines” en seis meses
La Guardia Civil y la Policía Autonómica repartieron en comedores sociales el pescado inmaduro que fue retirado en tiendas, camiones o mercados
La Guardia Civil y la Policía Autonómica están atentas a los “pezqueñines”. Lo hacen en colaboración con los Servicios de Inspección Pesquera de la Junta de Andalucía, que trabajan para interceptar todas las partidas de pescado inmaduro que intentan “colarse” en camiones y furgonetas rumbo a tiendas y mercados. La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural informa —en un comunicado— de que decomisó 47.593 kilos de productos pesqueros inapropiados para el consumo durante el primer semestre, lo que conlleva un aumento del 19% respecto a todo el ejercicio 2015 —se incautaron 40.023 kilos en ese año—. De hecho, se han levantado 3.025 actas sancionadoras.
Pese a que Jaén no tiene puerto de mar, también es tierra de “pezqueñines”. El Gobierno andaluz afirma que decomisó 2.505 kilos de pescado inmaduro que, curiosamente, está muy por encima de otras provincias, como Almería, con 719 kilos, y Granada, con 37 que sí que tienen puertos a lo largo de su territorio y, en teoría, debería de existir una mayor actividad en la pesca, transporte y consumo de pescado inmaduro.
La Junta de Andalucía manifiesta que el 63% de los productos pesqueros incautados se han destinado a la alimentación de personas desfavorecidas de Andalucía a través de entidades benéficas o de carácter social, tales como bancos de alimentos, siempre y cuando hayan pasado los controles necesarios para garantizar el cumplimiento de los requisitos sanitarios. Las infracciones más frecuentes que originan decomisos se deben, principalmente, a ejercicios de pesca en fondos o caladeros prohibidos o zonas vedadas y pesca sin autorización; incumplimiento de jornadas y horarios de pesca; tenencia, transporte, almacenamiento o venta de productos pesqueros de talla no reglamentaria; una identificación incorrecta en cajas o embalajes de especies contenidas, y transporte o la venta de productos pesqueros sin documentación que acredite su procedencia.