Cooperativas prevén 100.000 toneladas menos de producción
La organización advierte que el aceite recogido está por debajo de 1,15 millones
El sector oleícola no ha vivido una temporada 2019-2020 para recordar. Ha sido una cosecha marcada por las protestas por los bajos precios del aceite de oliva y por la iniciativa europea de las licitaciones de almacenamiento privado para dar solución a este problema, algo que no ha llegado. La producción fue pobre, con menos toneladas de aceite de oliva que lo estimado en el mes de octubre —al inicio de la campaña— por las autoridades. Pero peor puede ser la situación, ya que Cooperativas Agro-alimentarias prevén una reducción en la recolección de aceite de oliva con respecto a las últimas cifras oficiales de en torno a 100.000 toneladas, lo que situaría la producción finalmente en valores inferiores al 1,15 millones como se catalogó al final de la temporada. Esto podría ocasionar que se llegara a la cifra más baja de las últimas cinco campañas de recolección de aceituna.
Aunque lo positivo es que este hecho, unido a la retirada del mercado durante los meses anteriores de más de 200.000 toneladas por parte de las cooperativas, tras la activación del mecanismo de almacenamiento privado, previsiblemente impactará de forma positiva en los precios en origen, que lleva mucho tiempo a niveles por debajo del umbral de rentabilidad, marcado por la Asociación Española de Municipios del Olivo (AEMO) en 2,73 euros el kilo de aceite virgen extra.
Asimismo, las Cooperativas
Agro-alimentarias resaltaron que el mercado ha funcionado además a muy buen ritmo durante esta primera mitad de campaña, ya que se están registrando las mejores cifras de ventas de los últimos años, alcanzando valores mensuales de en torno a las 130.000 toneladas, destinándose más del 65% de estas a cubrir la demanda de los mercados internacionales, algo que es imprescindible en momentos como el actual.
Por otro lado, el sector mostró su preocupación por la escasez de precipitaciones durante los últimos meses, que está afectando no solo a España, sino de forma aún más crítica a países de la cuenca mediterránea como Italia, Grecia, Túnez y Marruecos, que, de seguir así, sufrirán consecuencias importantes en sus próximas producciones. No obstante, las cooperativas trasladaron un mensaje de tranquilidad a la sociedad y reiteraron que aumentan, día a día, sus esfuerzos para poner en el mercado uno de los productos básicos de la dieta española.
Hay que recordar que en la provincia jiennense se había producido 394.005 toneladas, 61.065 menos de lo aforado (445.070) en un principio. Asimismo, la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) confirmaron que la producción de aceite en España fue menor de la prevista en el aforo inicial, casi un 12 por ciento, ya que de las 1.250.000 toneladas previstas en octubre del año pasado, no llegaron a 1.150.000. En Andalucía los datos de producción hasta el mes de febrero fueron de 883.400 toneladas de aceite, 100.000 menos de las aforadas. Respecto a cosechas anteriores, tomando en cuenta los datos a mes de febrero de la anterior temporada 2018-2019 se produjo 1.690.600 toneladas de aceite, por lo que la producción de este año es casi un 35% inferior, que podía ser aún más después de la previsión de Cooperativas Agro-alimentarias.