Amago de denuncias por el agua del Guadalquivir en plena sequía
Los regantes de Santa María Magdalena aseguran que la Confederación Hidrográfica no realizó un desembalse el pasado fin de semana en los términos acordados
La amenaza es ya una realidad y dejan caer que acudirán a todas las instancias posibles para que su voz sea tenida en cuenta. La Comunidad de Regantes Santa María Magdalena pone en conocimiento de los ciudadanos de Jaén, y en particular a los regantes, que, nuevamente, se sienten “engañados” por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. ¿Por qué? Aseguran que el desembalse del fin de semana pasado acordado por la Comisión Permanente de Desembalse, celebrada el día 4 de octubre, no fue realizado el mismo en los términos previstos.
“En efecto, en la Comisión Permanente de Desembalse del día 4 de octubre se acordó un desembalse de 20 hectómetros a repartir en los fines de semana 8 y 9, y 15 y 16 del presente mes de octubre para aquellas comunidades de regantes que no hubiesen agotado su dotación, como es el caso de la nuestra, siempre y cuando no existiera previsión de lluvias, situación que no ha sucedido”, aseguran en un comunicado. En este sentido, manifiestan: “A continuación, esta comunidad da traslado de este acuerdo a los comuneros (1.250) y una superficie de 6.000 hectáreas de los términos municipales de Mengíbar, Jaén y Cazalilla, los cuales preparan sus dispositivos para proceder al riego y cuál es nuestra sorpresa que no ha llegado desembalse alguno”. Y agregan: “Esta situación la hemos vivido recientemente, cuando se cortó, sin previo aviso, el desembalse de la campaña de riego una semana antes de la fecha de finalización acordada”. Tachan esta acción de “engaño masivo” a unos agricultores que sufren graves perjuicios por la “irregular” gestión del agua que, según exponen en la nota, desarrolla la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. “Desde La Comunidad de Regantes Santa María Magdalena vamos a iniciar las medidas oportunas para que no sea nuevamente nuestra provincia la que se vea perjudicada, avasallada e ignorada por el reparto de un recurso público como es el agua y al que como concesionario tenemos derecho y que se nos trate en pie de igualdad”, concluyen.
