“Hasta hace veinte años España concursaba con aceites lampantes”

Anuncia Carpio Dueñas

24 ene 2016 / 10:30 H.

Es bióloga y especialista en Grasas y Aceites por el Instituto de la Grasa de Sevilla, que es un Centro de Investigación de la Agencia Estatal del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Su primer destino fue la Delegación de Agricultura de Jaén y el panorama que encontró en el mundo del aceite de oliva, en la zona olivarera de mayor producción del planeta, era, sencillamente, desolador. Un mundo en el que se rendía culto, por así decirlo, desde tiempo inmemorial, al aceite atrojado, que justo es el de más baja categoría. Desde el primer momento, Anuncia Carpio se puso manos a la obra para promover un cambio de mentalidad que relegase la mínima expresión al aceite atrojado y que almazaras y productores se concienciasen en que el camino correcto que había que seguir era el de la búsqueda de la calidad y, aun mejor, de la exquisitez. Ha sido mucho el esfuerzo realizado y la senda recorrida en tres décadas largas, pero hoy Jaén produce los mejores aceites de oliva del mundo, gracias a su granito de arena. Esta semana, el consejo rector del Instituto de Estudios Giennenses la propuso como consejera.