¿Y las obras de la Catedral?
Cinco meses después de que el Gobierno sacara a licitación las obras de rehabilitación del pabellón 2 de la Catedral y con el otoño a la vuelta de la esquina, a la adjudicación del proyecto todavía le queda un largo tramo que recorrer.

Así lo confirman desde el Ministerio de Cultura, Educación y Deporte. ¿El motivo? Una serie de trámites insoslayables y también absolutamente normales —indican las fuentes consultadas por este periódico— que harán que la adjudicación definitiva de las obras no se materialice hasta dentro de un mes, por lo menos.
La apertura de plicas descubrió, a principios de junio, a 17 empresas interesadas en hacerse con esta obra pública que está valorada en 143.989 euros. Y, ahora, toca calibrar los pros y contras de cada oferta. Esta misión le corresponde al Instituto de Patrimonio, cuyos técnicos deberán analizar las propuestas y justificar cuál es la más adecuada. Una vez detallados los motivos, el informe pasará a la Junta de Contratación de la Secretaría de Estado de Cultura, que será la encargada de adjudicar la obra.
Pero tampoco ahí finalizará el proceso administrativo, porque, con la adjudicación provisional, y sin obviar la posibilidad de que alguna de las empresas que se presentaron al concurso recurra la decisión, la adjudicataria de los trabajos deberá justificar que, entre otras cuestiones, está al día con la Seguridad Social en los pagos a sus empleados. Solo después se producirá la adjudicación definitiva de unas obras que se esperan como agua de mayo. Y no por lo ambicioso de los trabajos que, de hecho, apenas cubren un 3% de las necesidades reales que tiene la techumbre catedralicia. Se debe a que hace ya tres años que la progresiva ejecución del Plan Director de la Catedral quedó interrumpida por las políticas de austeridad y, desde entonces, a pesar de que, año tras año, el Gobierno ha reflejado partidas en los Presupuestos Generales (PGE), ninguna de las promesas recogidas en el papel se han cumplido y el deterioro de las cubiertas de una de las principales joyas de la arquitectura local no deja de agravarse.
El arquitecto-conservador del templo, Pedro Salmerón, redactó el proyecto de la intervención que se llevará a cabo en este pabellón el año pasado. El objetivo prioritario de estas obras es la paralización de los procesos patológicos que se han detectado en las cubiertas proponiendo las soluciones constructivas necesarias para que no vuelvan a aparecer. Será un trabajo muy minucioso, como indicó en su día a este periódico el autor del proyecto, porque se trata de renovar completamente la estructura de madera del pabellón. No obstante, según el pliego de condiciones, la duración de las obras será de 5 meses.
Aunque el Plan Director de la Catedral de Jaén se redactó en el año 2000, los primeros trabajos no empezaron en la techumbre hasta cinco años después. Las tareas se centraron entonces en el pabellón en el que más se acusaba el deterioro y continuaron hacia el nivel intermedio de las cubiertas en los laterales. Las últimas obras con dinero estatal se ejecutaron entre los años 2010 y 2012. Para dar una muestra de las necesidades del templo jiennense basta decir que la rehabilitación que todavía queda por acometer en sus cubiertas ronda los 4 millones.