Victoria Barranco "acompaña" a Cristo en sus últimos momentos
Victoria Barranco Chamorro emocionó al hablar sobre los últimos momentos de la vida de Jesucristo. La marteña pronunció el noveno pregón juvenil de la Semana Santa promovido por la Tertulia Cofrade El Claustro y brilló al interpretar “La Saeta” de Serrat.
En el escenario deslumbraron el manto dorado y negro de La Amargura y su corona, cuadros de la vida de Cristo del gran Manuel Portillo, los cirios y la corona de espinas de Jesús de la Oración en el Huerto. Allí, una joven marteña, Victoria Barranco Chamorro, presentada por el cofrade Pablo Martos, “sufrió” por los últimos momentos que le tocó vivir al Señor en la Tierra. Con un discurso que llegó al corazón de los presentes, en un acto organizado por la Tertulia Cofrade el Claustro, la pregonera juvenil de la Semana Santa marteña habló de la Pasión y la Muerte de Jesús. Y, como si de un sueño se tratase, estaba allí, llorando por Jesús. “Ando con Él, siento su pesadumbre, siento el frío en mis pies y manos, el aire en mi cara, recorriendo mis huesos. Pienso qué será de mí cuando llegue con él al lugar donde fue condenado”, relató la pregonera.
Victoria Barranco “sujetó su rostro” con sus manos. “Señor mío, no lo permitas”, le gritó. Presenció el dolor de María y vio a Jesús muerto en la cruz. Acto seguido recordó a los jóvenes que “sienten cada ‘levantá’ y cada saeta” y a los que no experimentan “estos sentimientos” les indicó que “aún no es tarde”. Y si el discurso fue emocionante no menos intenso resultó el momento en el que Victoria Barranco, en un tablao flamenco, reflejó “el arte que la Semana Santa lleva en sus hombros año tras año”. Con el acompañamiento de Irene García al baile, Pedro Álvarez a la guitarra, Guillermo Gallardo con la viola e Irene Martínez a los coros y las palmas, cantó “La Saeta”, el poema de Antonio Machado que popularizó Joan Manuel Serrat. SILVIA RUIZ DÍAZ / MARTOS