Un "Belin" en el mercado

El recientemente rehabilitado e inaugurado mercado central de abastos acoge, en su interior, una nueva obra de arte que se suma al ya de por sí carácter histórico del edificio. Y es que el reconocido grafitero linarense Miguel Ángel Belinchón, “Belin”, ha dotado el significativo inmueble comercial de un colorido mural de grandes dimensiones que preside uno de los accesos principales.

23 dic 2014 / 10:49 H.

 

“Teníamos el gusto de que un gran artista de Linares, como es ‘Belin’, dejara su sello en este emblemático inmueble del mercado, con un mural singular en tres dimensiones que ha permitido, además, recuperar algunos elementos urbanos, como el primer semáforo que se instaló en las Ocho Puertas”, explicó el concejal de Patrimonio Histórico, Daniel Campos.

La nueva obra de “Belin”, que representa la figura de un niño pescando un atún, mide unos seis metros de altura. Fue realizada en metal galvanizado y cuenta con diferentes partes en relieve. En el mural resalta el color azul como tonalidad predominante y otorga una importante luminosidad a un espacio tradicional que goza de cierto toque de modernidad.

El artista mostró su satisfacción por la realización de esta obra, con la que quiso rendir homenaje al último puesto de venta de pescado que permaneció abierto en el mercado, antes de que se procediera a la unificación de todos los puestos de carnes, frutas y verduras en el mismo recinto.

“El mural está hecho con la idea de que perdure en el tiempo y, en próximos días, le pondremos más luz para que aumente la sensación de relieve. Creo que es una de las obras más importantes que he hecho en mi trayectoria, por dimensiones, material y, sobre todo, porque se va a quedar en Linares para que la gente que venga cada día a comprar se la encuentre de repente y la disfrute”, señaló Miguel Ángel Belinchón.

Con este nuevo elemento artístico, la decoración interior del mercado de abastos gana en notoriedad y relevancia, ya que complementa a los llamativos murales de forja de Francisco Baños que había en el ya desaparecido Teatro Olympia y que fueron instalados, en la galería comercial, tras las obras de rehabilitación llevadas a cabo por el Ayuntamiento. Sin duda, una novedosa mezcla de pasado y futuro en el mismo lugar.