Tocapelotas del Goya
Ignacio Frías /Jaén
El Chiricoro del Goya es una de las agrupaciones de Carnaval más veteranas y estables de Jaén y también la más numerosa. Con veinte años a sus espaldas, conoce de primera mano todos los avatares de la fiesta, sus luces y sus sombras.

El Chiricoro del Goya es una de las agrupaciones de Carnaval más veteranas y estables de Jaén y también la más numerosa. Con veinte años a sus espaldas, conoce de primera mano todos los avatares de la fiesta, sus luces y sus sombras.
Es una macro “chirigota” de 35 miembros, que siembra afición.
El Chiricoro del Goya irrumpe este año en el Carnaval de Jaén con un nombre cañero, Los Tocapelotas, inspirado en una película de comienzos de los 80 de la factoría de Hollywood. El tipo es el de los jugadores de fútbol americano, pero al estilo andaluz. Este tipo, explica José Campos Olivas, miembro de esta peña carnavalera, “ya fue propuesto años atrás, pero no se llegó a concretar y hemos decidido sacarlo para nuestro vigésimo cumpleaños”.
El Chiricoro del Goya nació hace veinte años. Lo integraba un grupo de amigos y vecinos del residencial Goya, con el único y principal objetivo de “pasarlo bien”. “Nadie podía imaginar por aquel entonces, que la cosa perduraría en el tiempo”, matiza José Campos. Con el tiempo el grupo ha ido cambiando pero siempre fue muy numeroso, ya que entre sus miembros se incluyen niños que desde muy corta edad disfrutan disfrazándose y acompañando a sus padres en las actuaciones. Al principio fueron ochenta “presos” lo miembros del chiricoro que llenaron las calles de Jaén con su mera presencia, ya que nunca antes se había visto en Jaén un grupo tan numeroso. A los cuatro años de andadura, el grupo participa por primera vez en el concurso de agrupaciones que se celebraba en el teatro Darymelia. En 1995 salieron como La Gran Corrida. Después hubo varios años de triunfos en el concurso de agrupaciones de Jaén, en coros.
Cumple el chiricoro
Cumple nuestro chiricoro,
veinte febreros na más,
veinte febreros cantando,
contigo disfrutando,
viviendo el carnaval.
Y aunque ya pesan los años,
siento la misma alegría,
los nervios, las prisas,
como el primer día,
cantando en tus calles,
y al son de las pedorretas,
compongo cuartetas
como un majareta,
mientras el cuerpo aguante, pa cantarte, pa cantarte. Y aunque cumplimos los veinte, veinte años de Carnaval,
De cortarme la coleta, pues por ahora ni hablar.
Déjame decirte que aquí tengo mi tesoro en esta gente, mi gente, que no cambio por ná.