"Mireia es un ángel en la piscina"

“No nos coge la felicidad en el cuerpo con la medalla. Se lo merece por el trabajo que ha realizado para llegar a los Juegos de Londres”, relató Miguel, que estaba indignado con algunos titulares de la prensa catalana. “Dicen que la primera medalla es catalana. No es así, porque mi hija es de Huelma y mi yerno nació en Freila, un municipio de Granada”, indicó. A sus 79 años, los abuelos reparten su residencia entre Huelma y Badalona. “A nuestra Mireia le encanta Sierra Mágina. La última vez que vino fue en Semana Santa de 2010. Ahora es más complicado, porque tiene un calendario completo y no para de viajar”, dijo. Miguel García se emociona cuando habla de ella. “Es un ángel en la piscina y una buena persona. Estamos orgullosos de ella y esperamos que siga en el mismo camino, que está caracterizado por la sencillez y humildad”, destacó. Su domicilio, situado en el número 6 de la calle Carnicería, estuvo concurrido durante la jornada. El abuelo de Mireia Belmonte dio las gracias a los huelmenses por las felicitaciones recibidas. “Nos hemos visto abrumados, mi señora y yo por las felicitaciones. Ahora quiero hablar con ella, pero sé que es muy difícil porque está muy lejos”, se lamentó. Sí confirmó que su hija Francisca y su yerno, José Belmonte, no se han desplazado a Londres y han seguido los Juegos Olímpicos desde su domicilio en Badalona. Precisamente, Mireia Belmonte, declaró en la jornada de ayer, tras entrar en la final de los 800 libre, que se nadan hoy: “No descarto nada en ninguna prueba”. Mireia reveló que tiene la medalla guardada bajo llave, que no durmió con ella por si se rompía y que había notado más confianza en sí misma tras su carrera de ayer. “Me siento bastante bien en el 800”, dijo la nadadora catalana. “Si alguien me hubiera dicho que iba a ganar la plata en el 200 mariposa, no me lo hubiera creído”, apostilló Belmonte. “Ha sido un liberación, el miércoles conseguí una cosa muy importante y ahora solo queda disfrutar la última prueba, y ya está”, dijo la deportista de Badalona, de 21 años, que añadió que tenía que nadar igual que el otro día: muy tranquila, dar lo máximo de mi y morir en el intento”. Belmonte contó a los periodistas en el centro Acuático de Londres que llegó a la Villa Olímpica sobre las doce y media  de la noche, que había algunos de baloncesto y me felicitaron. Estuvo en directo con  Nadal por la radio y le hizo mucha ilusión porque es su gran referente en el deporte español. 

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