Más de 900 firmas exigen el arreglo urgente de la Loma del Encinar

Nuria López Priego / Jaén
Socavones, falta de señalización, suciedad. El camino Loma del Encinar, en Los Villares, es un “peligro”. “Durante 14 años —dicen los vecinos— ha habido un abandono total”. Y, ahora, esa “dejadez” no la mitiga ni la reciente limpieza del tramo de la Quebrada de la Yedra, cortado desde marzo. En pos de su arreglo integral, ayer, se registraron, en la Subdelegación del Gobierno, 939 firmas.

    04 sep 2010 / 08:19 H.


    Son algo más de 900 rúbricas y sus firmantes están “dispuestos a llegar hasta donde la Ley” les permita           —con manifestaciones o, incluso, “dejando de pagar la contribución de las tierras”— para conseguir el arreglo integral el Camino Loma del Encinar, entre Los Villares y Fuensanta. Esta vía, que la alcaldesa, Carmen Anguita, se afana en repetir que es un “carril agrícola” y que los usuarios denominan “carretera”, fue la gran damnificada de las precipitaciones que se registraron el pasado invierno en el término municipal.
    Las copiosas lluvias fueron las causantes del espectacular corrimiento de tierra que, a principios de marzo, sepultó más de sesenta olivos del paraje conocido como la Quebrada de la Yedra y que cortó el Camino Loma del Encinar. La vía estuvo cerrada al tráfico hasta hace pocos días. A mediados de agosto, el Ayuntamiento envió una pala y a un grupo de operarios para que trabajara en la carretera, pero “únicamente” en el tramo de la Quebrada de la Yedra y, según Juan José Cabrera Siles, uno de los vecinos y usuario de esta vía: “Se ha hecho una chapuza para que nos callemos”. Comenta que los trabajos “se limitaron” a limpiar el lugar y a “hacer un parcheo de zahorra”. Pero             —añade— no es suficiente. “El camino está tan mal porque ha habido un abandono de catorce años”.    
    Por su parte, la alcaldesa, que confiesa que aún no ha visitado el lugar, replica: “Hemos hecho lo que querían los vecinos. Se ha limpiado el hueco que había, se ha quitado el agua y se ha abierto para que pasen los vehículos agrícolas porque es un camino agrícola”. Ciertamente, “sólo” pueden pasar tractores y “cuatro por cuatros”, pero —puntualiza Cabrera Siles—:  “El todoterreno tiene que estar en condiciones y hay que ponerle la reductora. Si no, no subes”. Este vecino se queja de que ni siquiera se ha señalizado que el camino está cortado y ha habido “varios turismos” que se han quedado atascados en este tramo.
    Otra vecina, María Elisa Romero, critica la pérdida de combustible y de tiempo que supone el no poder pasar por este camino, con el que la distancia entre Los Villares y Fuensanta se reduce “en unos 20 kilómetros” y advierte de las consecuencias que esto tendrá cuando comience la recolección de la aceituna. “[Loma del Encinar] nos servía para no colapsar la carretera de Valdepeñas con tractores. Ahora, tendremos que tomarla”. Y augura que será un “caos”.