Luis Heredia Barragán: 'Mi novela trata de la libertad de un loco al final de la dictadura'
Ignacio Frías /Jaén
Cuando Luis Heredia considera que una de sus novelas está madura, cerrada y a punto, no espera más y se la autoedita. Al fin y al cabo, no vive de la escritura, sino de su profesión, el ejercicio de la Abogacía. Todos sus títulos los ha publicado con la Editorial Círculo Rojo y los beneficios los destina a causas humanitarias o benéficas.

Cuando Luis Heredia considera que una de sus novelas está madura, cerrada y a punto, no espera más y se la autoedita. Al fin y al cabo, no vive de la escritura, sino de su profesión, el ejercicio de la Abogacía. Todos sus títulos los ha publicado con la Editorial Círculo Rojo y los beneficios los destina a causas humanitarias o benéficas.
—Hasta ahora, sus novelas las ha ambientado en guerras. ¿Considera que todo conflicto bélico tiene un lado novelesco?
—En mi caso, de todos esos enfrentamientos lo que he sentido es dolor, tanto con los judíos en Polonia, como con los musulmanes en la masacre de Srebrenica (Bosnia), como con la Guerra Civil española. Pero mi última novela, Las piedras imperfectas del camino, no tiene nada que ver con las guerras.
—¿De qué va?
—De un manicomio, durante la dictadura de Franco, situado en Andorra, con gente que sufre unas enfermedades mentales específicas. Concretamente, el protagonista padece agorafobia, pánico a los espacios abiertos. Es uno de los internos, pero tiempo atrás dejó a su novia en Andalucía. Otro de los enfermos encuentra una carta suya dirigida a la novia y se le ocurre escaparse para buscarla.
—¿En qué periodo de la dictadura se centra la acción?
—Al final. Cuando muere Franco. El espacio de libertad que encuentra el enfermo mental es un símil con la libertad que empiezan a vivir los españoles.
—El asunto de los manicomios, que era como se llamaba en esa época a esos centros de internamiento de enfermos mentales, siempre resulta muy delicado. ¿Desde qué punto de vista lo enfoca?
—En hacer ver a la gente que hay más enfermos mentales fuera que dentro. Pero, sobre todo, es una historia de amor imposible, porque no puede llevarse a cabo. Pero sí pone de manifiesto lo que el ser humano es capaz de hacer por amor.
—Curiosamente, estos días se estrena en los cines Los últimos días, una película de los hermanos Álex y David Pastor, ambientada en Barcelona, en la que toda la gente sufre agorafobia. ¿Por qué sale ahora a escena esa enfermedad?
—No lo sé. Aunque nos parezca una enfermedad lejana es bastante común. Es mucha la gente que padece horror de salir al exterior.
—¿Qué estilo literario imprime en su novela?
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