Las vivencias del embajador Cuenca

De Jaén para el mundo sin perder nunca la referencia y preferencias por sus raíces. Es el “embajador Cuenca” que volvió a su tierra con un nuevo libro bajo el brazo. En esta ocasión, no es su querida sierra la que protagoniza sus líneas, si no sus vivencias como testigo privilegiado de las decisiones que cambiaron el rumbo de la política internacional durante la década de los años 80, principalmente. Es De Adolfo Suárez a Gorbachov.

20 feb 2015 / 11:43 H.

Testimonios y confidencias de un embajador. En él, plasma sus encuentros y vivencias personales con figuras políticas fundamentales en la historia de España y del mundo en el último cuarto del siglo XX, como Adolfo Suárez, Gorbachov o Felipe González, entre otros, y que es fruto de sus años como embajador de España en distintos países como Bulgaria, Unión Soviéticay posteriormente en la Federación de Rusia  Grecia y Canadá, cuando vivió muy de cerca momentos históricos como la Transición, la entrada en la OTAN y la desaparición de la Unión Soviética.
El libro, tal y como recordó Vicente Oya, ya va por su segunda edición tras tres meses desde su publicación. El cronista de Jaén fue el encargado de presentar esta obra junto con el consejero director del Instituto de Estudios Giennenses, Pedro Galera, y el presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes. Este valoró la carrera como embajador de este diplomático nacido en Iznatoraf, “una atalaya desde la que ha llegado a las cumbres más altas de la diplomacia”. Idea que apoyó Oya: “José Cuenca ha llevado nuestro entrañable paraíso a las más lejanas latitudes”. “Esta obra tiene un gran interés histórico porque ofrece datos desconocidos y relevantes sobre algunas de las etapas más apasionantes de nuestra historia contemporánea, un periodo complejo, con infinidad de matices y puntos de vista encontrados, donde su privilegiada posición le permitió ser testigo directo de decisiones y acontecimientos cardinales”, defendió Reyes. “Es una publicación con el rigor y el sosiego que aporta el paso del tiempo”, añadió. “Es un libro vibrante, José Cuenca ha vivido con una profesionalidad extraordinaria su trabajo y también con la emoción de un ciudadano y es lo transmite en sus relatos. Lo hace con emoción, sinceridad y nervio”, destacó Pedro Galera. “Desde la primera página navega por los vericuetos laberínticos de la diplomacia, una emoción propia de una trama novelesca siendo una realidad”, añadió.   
Por su parte, Cuenca insistió en la relevancia de los dos personajes que dan título a la obra. “Suárez y Gorbachov son dos personas excepcionales que cambiaron sus países para mejor”. Y ellos, precisamente, fueron los que le pidieron que escribiera sus memorias, que dejara sus vivencias para la posteridad. “Son un conjunto de testimonios, de cosas que he visto con mis ojos, pero todas juntas creo que convierten este libro en importante”, añadió.