Las obras retrasan en 40 minutos el paso de Despeñaperros a Madrid

Silverio Fernández (Santa Elena) / Nuria López Priego (Jaén)
Hasta el más tranquilo de los mortales pudo perder ayer la paciencia en la autovía de Despeñaperros. Son sólo siete kilómetros los que se ven afectados por el montaje del viaducto que ejecuta Fomento sobre la A-4, pero salvarlos costó a los viajeros hasta cuarenta minutos, si conducían hacia Madrid y, veinte, si se dirigían al sur.

    20 ago 2009 / 09:01 H.

    No hubo incidencias significativas, pero las retenciones eran kilométricas desde primera hora de la mañana. Desde las nueve, la puerta de Andalucía era un auténtico embudo, sobre todo en dirección a Madrid. Era la primera de las tres jornadas en las que se producirán cortes como consecuencia de las obras de reforma que ejecuta el Ministerio de Fomento. En concreto, la causa de las retenciones que, ayer, alcanzaron hasta diez kilómetros es el montaje del tablero de un viaducto en las obras de la nueva calzada de Despeñaperros.
    A las ocho de la mañana, a la altura del kilómetro 259, se cerraron al tráfico dos de los cuatro carriles de la transitada A-4, en sentido Madrid. Llegados aquí, los conductores tenían que cambiar de calzada y utilizar, durante siete kilómetros, hasta el punto 251, uno de los dos carriles de la calzada que conduce a Andalucía. En el puente de acceso a Santa Elena, un dispositivo de la Guardia Civil de Tráfico informaba a los conductores del sentido de la circulación y de cómo incorporarse a Despeñaperros. “Tiene que tomar dirección a Sevilla o Bailén y, en el primer puente, situado en el paraje de Venta Nueva, hacer el cambio”, explicaban los agentes. Pese a que, según la Subdelegación del Gobierno de Jaén, se ha preparado una señalización acorde a la normativa vigente, esta es insuficiente, se quejaban los conductores. Se limita a algunas advertencias a la entrada del puente de acceso al municipio santaelenero y a un letrero luminoso, con la leyenda: “Carretera en doble sentido entre los kilómetros 258 y 251”.
    Como consecuencia, además de sufrir los molestos atascos que produjo el corte de estos siete kilómetros, los viajeros más confiados dieron alguna que otra vuelta absurda intentando bordear las obras. Entraban por el área de servicio que hay en este punto, pero, una vez ahí, se les obligaba a volver hasta Venta Nueva. Aunque —según la DGT— las mayores incidencias se registraron a las ocho de la mañana y a las doce y media del mediodía, los conductores que se dirigían a Madrid tardaban, de media, entre treinta y cinco y cuarenta minutos en salvar los siete kilómetros entre el punto 251 y el 258, y los que se dirigían a Andalucía, unos veinte.
    Este intervalo de la Autovía de Despeñaperros estará también hoy, cortado, entre las ocho de la mañana y las ocho de la tarde, y mañana, entre las ocho de la mañana y la una de la tarde.