La Policía descubre en un piso un moderno invernadero de marihuana
Rafael Abolafia / Jaén
Un piso de la calle La Luna guardaba en su interior una gran plantación de marihuana. La Policía Nacional de Jaén ha descubierto un moderno invernadero camuflado en una de las habitaciones de esta vivienda, con toda la tecnología necesaria para que las plantas de 'cannabis sativa' crecieran sanas y fuertes.

Un piso de la calle La Luna guardaba en su interior una gran plantación de marihuana. La Policía Nacional de Jaén ha descubierto un moderno invernadero camuflado en una de las habitaciones de esta vivienda, con toda la tecnología necesaria para que las plantas de 'cannabis sativa' crecieran sanas y fuertes.
La operación, denominada “Cogollo”, se desarrolló hace unos días y ha permitido desmantelar el mayor invernadero-secadero de marihuana descubierto en la capital en los últimos años. Han sido detenidos dos personas Juan Antonio J. C. y Juan Ramón A. J., ambos de 30 años, que están acusados de un delito contra la salud pública. Además, los agentes del Grupo de Estupefacientes han decomisado unas 125 plantas de marihuana en distintas fases de crecimiento, según explican fuentes judiciales cercanas al caso.
La investigación comenzó cuando una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana sospechó de los dos detenidos, cuando ambos estaban dentro de una furgoneta. El vehículo estaba aparcado en la calle Perpetuo Socorro y, cuando el conductor se percató de la presencia policial, comenzó la marcha. Por eso, los agentes alertaron de lo que ocurría a otra patrulla que estaba también en la zona y que fue la que dio el alto a la furgoneta unos minutos después.
Los funcionarios pidieron la identificación a los ocupantes del vehículo. Posteriormente, les pidieron que abrieran el maletero. Sus sospechas se confirmaron. Encontraron 11 macetas de marihuana y el material suficiente para montar un invernadero. Había transformadores, ventiladores, extractores de aire, tiendas modulares de plástico, dispositivos de luz nocturna, termómetros digitales y abono. Ese hallazgo permitió a los policías detener a Juan Antonio J. C. y a Juan Ramón A. J., los dos ocupantes de la furgoneta, que fueron trasladados a la Comisaría.
A partir de ahí, la Brigada de Estupefacientes de la Comisaría se hizo cargo de la operación y pidió el correspondiente mandamiento judicial para registrar la vivienda de uno de ellos. Se trata de Juan Ramón A. J., al que le constan antecedes por delitos contra la salud pública y al que el grupo antidroga seguía ya los pasos. En su casa estaba el “premio gordo”. En una de las dependencias de la vivienda, los agentes encontraron un moderno invernadero en el que había 124 plantas de marihuana con más de un metro de altura. La instalación estaba perfectamente acondicionada. Las macetas se hallaban encima de tarimas de madera. Varias lámparas de gran potencia funcionaban como “soles artificiales” y daban la luz suficiente a los cogollos, que eran regados mediante un sofisticado sistema de riego. La temperatura de la habitación estaba siempre controlada mediante termómetros digitales, ventiladores y extractores de aire.
Los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Guardia, que decretó la puesta en libertad con cargos de los dos arrestados, mientras se realiza la instrucción de la causa.