La piscina de Lopera abre al público una semana después

Las instalaciones se abrieron al público a las doce de la mañana, después de que el miércoles de la semana pasada tuvieran que ser cerradas por un “exceso de cloro” en el agua que causó que dos menores fueran atendidos en el centro de salud.
La alcaldesa, Isabel Uceda, explicó a este periódico, que el retraso en la apertura se debe a las diferentes tareas de mantenimiento que se han acometido. Concretamente, lo que se hizo fue vaciar la mitad de la piscina y volver a llenarla, esta vez, con agua extraída de un pozo. Eso requirió que tuviera que ser tratada de nuevo, lo que retraso el inicio de la temporada de baño.

Ahora, se ha garantizado que los niveles de cloro son “óptimos”. La alcaldesa socialista hace hincapié en que, en ningún momento, se sobrepasaron los límites establecidos, aunque sí reconoció que la cantidad de químico era algo “alta”. Lo que también rechazó es que se compare este episodio con el de hace dos años, cuando once menores tuvieron que ser ingresados por intoxicación. “Eso fue un caso muy grave que nada tiene que ver con lo que ha pasado ahora. Esta vez nadie ha resultado intoxicado porque ya pusimos los medios necesarios para que no volviera a pasar aquello”, defendió la regidora socialista.

"Sin información"

Por otro lado, el grupo de IU en la oposición, denunció, a través de las redes sociales, que el actual equipo de Gobierno no les facilita información sobre lo ocurrido y que, incluso, se negó la entrada a concejales a las instalaciones. En este sentido, Uceda asegura que es “totalmente falso”. “Entraron en dos ocasiones, y en una de ellas, a tomar muestras para hacer una analítica. Lo que nosotros hicimos fue decirles que ellos no son nadie para tomar muestras, que para eso ya están los organismos pertinentes. Por eso les pedimos que si querían acceder fuese, siempre, con nuestro conocimiento y nuestra compañía”, explicó. Además, hizo hincapié en que es la propia Delegación de Salud la que ha hecho algunos de los controles del agua.

La piscina municipal abrió la temporada de verano el martes 23 de junio. Ese mismo día, dos menores, según el Ayuntamiento, tuvieron que ser atendidos en el centro de salud por presentar síntomas derivados del “exceso de cloro” como, por ejemplo, el enrojecimiento de ojos o la necesidad de utilizar aerosoles. Sin embargo, desde la coalición de izquierdas se denunció que fueros diez los niños que se vieron afectados por la alta concentración de producto químico. En cualquier caso, tanto equipo de Gobierno como oposición lanzaron, desde el principio, un mensaje de tranquilidad a la población porque no tenía que ver con lo ocurrido en 2013.