La importancia de la inteligencia emocional

Ángel Plaza Chillón/Desde La Iruela. La inteligencia emocional es la capacidad para reconocer sentimientos propios y ajenos, y la habilidad para manejarlos. El término fue popular por Daniel Goleman, con su célebre libro “Inteligencia emocional” publicado en 1995. Y la inteligencia emocional se puede dar en estas formas: conocer las emociones y sentimientos propios, manejarlos, reconocerlos, crear la propia motivación, y gestionar las relaciones.

    17 abr 2012 / 10:41 H.

    Ejemplo, un beso. Con él manifestamos nuestros sentimientos y evocamos emociones. La revelación de las emociones en los resultados del trabajo, la investigación sobre el tema siguió ganando impulsos, pero no fue hasta la publicación del trabajo, la investigación sobre el tema siguió ganando impulso, pero no fue hasta la publicación del célebre libro de Daniel Goleman: Inteligencia Emocional. El por qué puede importar más que el concepto de corriente intelectual, se convirtió en muy popular. La región más primitiva del cerebro es el tronco encefálico, que regula las funciones vitales básicas, como la respiración o el metabolismo, y lo compartimos con todas aquellas especies que disponen de sistema nervioso, aunque sea muy rudimentario. De este cerebro primitivo emergieron los centros emocionales que, millones de años más tarde, dieron lugar al cerebro presente: el neocórtex. El hecho de que el cerebro emocional sea muy anterior al racional y que éste sea una derivación de aquél, revela con claridad las auténticas relaciones existentes entre el pensamiento y el sentimiento. En el cambiante mundo social, uno de los inconvenientes de este sistema de alarma neuronal es que, con más frecuencia de la deseable, el mensaje de urgencia mandado por la amígdala suele ser obsoleto. La amígdala examina la exponencia presente y la compara con lo que sucedió en el pasado, utilizando un método asociativo, equivocando situaciones por el mero hecho de compartir unos pocos rasgos característicos similares, haciendo reaccionar con respuestas que fueron grabadas mucho tiempo atrás, a veces obsoletas. Las conexiones existentes entre la amígdala (y las estructuras lúmbicas) y el neocórtex constituye el centro de gestión entre los pensamientos y sentimientos. Esta vía nerviosa explicaría el motivo por el cual la emoción es fundamental para pensar eficazmente, tomar decisiones inteligentes y permitirnos pensar con claridad. La corteza prefrontal es la región cerebral que se encarga de la “memoria de trabajo”. No existe un test capaz de determinar el “grado de inteligencia emocional”, a diferencia de lo que ocurre con los test que miden el cociente intelectual(CI). La inteligencia emocional, “capacidad adaptativa del ego”, estableciendo dos tipos teóricamente puros, aunque los rasgos más sobresalientes difieren ligeramente entre mujeres y hombres: los hombres que poseen una elevada inteligencia emocional suelen ser socialmente equilibrados, extravertidos, alegres, poco predispuestos a la timidez y a rumiar sus preocupaciones. Su vida emocional es rica y apropiada; se sienten, en suma, a gusto consigo mismos, con sus semejantes y con el universo social en el que viven. Las mujeres emocionalmente tienden a ser energéticas y a expresar sus sentimientos sin ambages, tienen una visión positiva de sí mismas y para ellas la vida siempre tienen un sentido. Su equilibrio social les permite hacer rápidamente nuevas amistades; se sienten lo bastante a gusto consigo mismas para mostrarse alegres, espontáneas y abiertas a las experiencias sensuales. El concepto de “Inteligencia Emocional” empatiza el papel preponderante que ejercen las emociones dentro del funcionamiento psicológico de una persona cuando ésta se ve enfrentada a momentos difíciles y tarcos importantes: los peligros, las pérdidas dolorosas, la persistencia hacia una meta a pesar de los fracasos, el enfrentar riesgos, los conflictos con un compañero en el trabajo. En todas estas situaciones hay una involucración emocional que puede resultar en una acción que culmine de modo exitoso bien interferir negativamente en el desempeño final. Cada emoción ofrece una disposición definitiva a la acción, de manera que el repertorio emocional de la persona y su forma de operar influirá decisivamente en el éxito o fracaso que obtenga en las tareas que emprendan. Este conjunto de habilidades de carácter socio-emocional y lo que Goleman definió como inteligencia emocional.